Coronavirus en Asturias | «Estamos listos para recibir a todos nuestros clientes con seguridad»

La gerente de la Unión de Comerciantes del Principado asegura que «el sector está listo y ha tomado todas las medidas necesarias para trabajar con seguridad». Una seguridad que también tiene Carmen Moreno de que el cliente «tiene ganas de comprar, de volver a la normalidad». La prueba la tiene ella en lo sucedido «en el Día de la Madre. Los comercios han tenido muchas ventas, pese a estar cerrados».

Una normalidad en la que pesará mucho lo cercano. «Solo pueden abrir los locales de menos de 400 metros cuadrados y no se puede ir a comprar a otro municipio, lo que hará ver la importancia del comercio tradicional».

Pero no solo permitirá ver su importancia. También será la primera toma de contacto con la nueva normalidad: la de las mascarillas, los guantes y los turnos. «Solo atenderemos a los clientes que tienen cita previa», recuerdan tanto Diego Martínez como Laura Torre. El primero tiene una zapatería en Gijón. La segunda, una tienda de moda en Oviedo. «Yo tengo reservas ya desde el jueves. La mayoría nos pide zapatillas para andar por casa, pero también tengo una clienta que quiere comprar zapatos antes de ir al hospital», explica Martínez.

«Aquí también tenemos cita previa. De los tres probadores que hay en la tienda, los iremos utilizando por turnos. Extremaremos las medidas de seguridad», precisa Torre, que repartirá mascarillas y gel entre las clientas.

Idéntica protección habrá en las peluquerías y centros de estética. Patricia Lafferas, de la peluquería Patri Laffer's, en Oviedo, daba ayer el último repaso a su local, dispuesta a reabrir hoy. «Abriré yo sola y solo atenderé a una clienta de cada vez y dedicaré quince minutos a limpiar tras cada uso». Tanto ella como la clienta llevarán «mascarilla».

Lo mismo ocurrirá en la peluquería Sotolongo, de Gijón, donde su propietario, Jorge Luis Pérez Sotolongo asegura que «el uso de mascarilla guantes, batas y patucos desechables está garantizado». En su local entrarán tres clientes por turno «ya que somos tres trabajando», aunque todos estarán «a dos metros de distancia», ya que han separado todos los sillones.

En el centro de estética Esencial Mediterráneo, de Avilés, lo que han colocado son «alfombras higienizantes para los zapatos y termómetros para tomar la temperatura antes de entrar en las cabinas», explica María Jesús Parte. Ella solo abrirá hoy el espacio de estética, «ya que la tienda sigue, de momento operativa online».

Como el resto de sus compañeros, insiste en que la desinfección «está garantizada. La propia clienta podrá ver cómo lo hacemos». Lo que no verá, o no mucho, la clienta es a la profesional que la trata. «Las trabajadoras irán protegidas al máximo», lo que supone mascarilla, bata y guantes.

Más futurista será la imagen que se encuentren los clientes de la ferretería Jovi, en el ovetense barrio de La Tenderina. «Vamos a poner mamparas, marcadores de distancia y todo nuestro personal irá debidamente equipado con pantallas protectoras, mascarillas y guantes».

Sin riesgo también trabajará Miguel Camacho, en el centro de fisioterapia homónimo que regenta en Avilés. «Haré un triaje telefónico para conocer los antecedentes del paciente, si tiene síntomas o si ha tenido contacto con personas enfermas de coronavirus. Una vez que eso pase, le daré cita. Estos días de restricciones aumentaré el margen entre paciente y paciente. para que me dé tiempo de desinfectar todo entre unos y otros. La nueva normalidad.