Historias de Asturias | 1973 | Hace 50 años
'El Pescaílla' habla de LolaHistorias de Asturias | 1973 | Hace 50 años
'El Pescaílla' habla de LolaEran uno de los matrimonios más conocidos de España, aunque ella era quien cortaba la pana de una fama que ya le venía de veinte años atrás y que aún colea hoy. Antonio González, 'El Pescaílla', y Lola Flores fueron los protagonistas, hace medio siglo, ... de la sección de EL COMERCIO 'Las famosas vistas por sus maridos'. Hablaba él. «Yo conocí a Lola hace muchos, muchísimos años, y ya por aquel entonces era famosa». Que fuera la mujer la más conocida implicaba, en aquellos años, una pregunta obligada al marido. «¿No se siente acomplejado por esto?», preguntábamos a González. Y él era implacable: «No. En absoluto».
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Claro que otras partes de la entrevista no se podían sustraer a su tiempo y forma. Reconocía 'El Pescaílla' que Lola Flores tenía un carácter menos fuerte del que se le atribuía, pero fuerte a fin de cuentas, y que, al final, «el marido (...) es quien hace y deshace». Era él quien corría con los gastos, «naturalmente», apostillaba, aunque la que más dinero aportaba al matrimonio fuera ella. «Lola gana más que yo», contestó a regañadientes, «pero todo va a un fondo común». También decía 'El Pescaílla' que, al bajarse del escenario, Lola Flores era «una perfecta madre y esposa», aunque no caía en valorar esas mismas cualidades en su caso particular.
Decía, eso sí, haber estado celoso más de una vez. «Ahora no tengo ningún motivo, pero ya se sabe que cuando se quiere, siempre hay motivo para los celos (...) Un matrimonio sin discusiones debe ser muy aburrido». Hombre de su época, hace ahora la friolera de 50 primaveras, 'El Pescaílla' aseguraba que el día en que se retirase su mujer, él lo haría también; y que el divismo de la 'Lola de España' no era sino una caracterización más del personaje de la folclórica. «Todo eso se queda en la puerta de nuestra casa cuando entramos», nos dijo. «Toda artista con una fama como la de Lola tiene que adoptar cierto divismo de cara al exterior», y ya no hubo más tela que cortar. 'El Pescaílla', incómodo a cierto punto con la interviú, cogió su guitarra y sustituyó las respuestas por acordes. 125.000 pesetas costaba su actuación... la mayoría de ellas, para Lola.
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