Felicitación real enmarcada en Somao

El escenario, el bellísimo Pueblo Ejemplar de este año, aporta un extra de frescura, de naturaleza y naturalidad, que envuelve a la Princesa de Asturias. Ya es el tercer año consecutivo -primero fue Asiegu (2019) y antes los Lagos de Covadonga (2018)- que la Familia Real escoge el Pueblo Ejemplar para felicitar las fiestas. Una felicitación que es también declaración de intenciones para la Monarquía: la de mirar al frente. Lo demostraron ayer el Rey y su primogénita, en un acto de la Fundación Princesa de Gerona. En español y catalán, la heredera al trono pronunció unas palabras, como ya hizo el año pasado. «Ojalá que pronto podamos entregar nuestros premios como a todos nos gustaría. Nuestra Fundación seguirá siendo el gran referente de apoyo al talento joven de nuestro país», prometió.

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EL Comercio / AGENCIAS

Quien también parece mirar hacia adelante es el Rey Emérito. La Casa Real ha mantenido su firma en una de las dos felicitaciones enviadas, pese a la controversia generada por sus presuntos negocios en el extranjero y las investigaciones abiertas por la Fiscalía del Tribunal Supremo. En Emiratos Árabes desde el pasado 3 de agosto, cada vez son más las informaciones que apuntan a que don Juan Carlos querría volver a España y pasar aquí las fiestas. De momento, se ha hecho presente en un 'christmas' que firma con su esposa, la reina Sofía. Un mensaje más escueto -«Felices Pascuas y Año Nuevo»- y rubricado, junto a la imagen del retablo del siglo XVI sobre 'La Natividad' de Juan Correa de Vivar, una obra que guarda el Museo del Prado.

Dos felicitaciones bien distintas. En todo. Hasta en el color de la tinta: rojo, en la de las hijas de Felipe VI, y azul, en la tarjeta de los eméritos.