JOSÉ ANTONIO GONZÁLEZ
MADRID.
Miércoles, 18 de noviembre 2020, 02:52
Ocho minutos. Ese ha sido el tiempo que ha durado la misión del primer satélite 'made in Spain' cien por cien. Un corto viaje que se esperaba durara más de diez años alrededor de la Tierra. ArianeSpace, la empresa gala propietaria del ... cohete Vega que transportaba al satélite español, ha asegurado que el «error no se debe a un mal diseño de la nave, sino a una serie de errores humanos» que provocaron el desvío de la trayectoria marcada para Ingenio. 480 segundos que han dado al traste con 200 millones de euros, más de 500.000 horas de trabajo y doce años de preparación. «Estamos apenados por lo ocurrido», aseguran fuentes de la misión a este periódico. «Quiero presentar mis más profundas disculpas a nuestros clientes», señala Stéphane Israël, director ejecutivo de Arianespace. No obstante, la industria aeroespacial española es optimista, ya que el «satélite fue entregado en perfecto estado de revista y funcionamiento y, como tal, ya ha demostrado lo que se perseguía».
Publicidad
El objetivo, recuerdan, era «no tener que depender de tecnología extranjera en proyectos espaciales», señalaba Jorge Lomba, jefe de Programas Aeroespaciales del estatal Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), horas antes del lanzamiento de Ingenio. A pesar de no llegar a su destino final, la misión española no quiere ni oír hablar de fracaso. «El objetivo prioritario se ha cumplido, ya que esta capacitación y excelencia de la industria española ha generado un nuevo contrato, firmado el pasado viernes antes incluso del lanzamiento», comentan desde la misión en Kourou (Guayana Francesa).
En esa línea se ha pronunciado el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque: «Las tecnologías desarrolladas han capacitado a las empresas españolas, facilitando que accedan a nuevos contratos como la recién firmada misión LSTM».
Este nuevo encargo de la ESA a la filial española de Airbus Defence and Space permitirá a la industria aeroespacial española desquitarse de esta misión fallida con el desarrollo del primer programa de observación de la Tierra con Copernicus, que se construirá en España.
Noticia Relacionada
Ingenio es el primer proyecto espacial completamente español. La aventura ha sido financiada por el CDTI y su realización ha estado a cargo de un consorcio industrial de empresas españolas, entre ellas Airbus Defence and Space, como principal contratista industrial del satélite, y SENER e INDRA, responsables de la carga útil y el segmento terrestre. «Han participado centenares de personas en este proyecto», recalca el jefe de Programas Aeroespaciales del CDTI. «Ingenio es como la tesis de doctorado de nuestra industria y tendrá importantes efectos positivos en el futuro», ilustran miembros de la misión.
Publicidad
El satélite estaba destinado a ser el primer 'gran hermano' español fuera de la Tierra. Financiado por el Estado, equipaba una avanzada cámara dual que puede tomar imágenes de la superficie terrestre con una resolución de 2,5 metros y «es capaz de hacer 600 imágenes por día, lo que habría permitido fotografiar la Península Ibérica en dos meses», relata Alfonso Martínez, responsable de ingeniería de Sistemas Airbus DS Spain. Dos ópticas extraordinarias que fueron fabricadas por Sener. Asentada en la localidad vizcaína de Getxo, esta firma aeroespacial vasca ha sido la encargada de desarrollarlas.
«Sus cámaras podrían distinguir una moneda de un euro a diez kilómetros de distancia, siendo capaces de obtener imágenes muy valiosas para la cartografía», apunta Martínez.
A esta tecnología se le sumaba un particular GPS que llega a través de un sensor solar que era el encargado de orientar el satélite hacia el Sol. En su puesta en marcha colaboraron la Universidad de Sevilla y la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).
Publicidad
Se esperaba por ello que resultara útil para elaborar mapas de los lugares que sufran desastres naturales como inundaciones, incendios forestales y terremotos, y poder ofrecer a las autoridades y equipos de rescate información actualizada sobre su evolución para poder actuar de manera más precisa. «Ingenio es mucho más que un satélite. Es un sistema totalmente operativo», explicaba Dominique Gillieron, jefe de los programas de exploradores terrestres de la ESA, horas antes del despegue.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.