«Me enamoré de la flor del guisante»

Nada le hacía pensar en 2014 a Toni Jardón, cuando ganó el premio al mejor blog de Asturias que entrega cada año este periódico, que acabaría convirtiéndose en un fenómeno global. «Ha costado mucho trabajo y nunca había pensado lograr estas cifras, pero ahora parece que la gente se ha enganchado y hay veces que mi vídeo semanal tiene hasta tres millones de espectadores», celebra. Hace poco que su canal de Youtube ha superado la imponente cifra de un millón de suscriptores. ¿Su receta? Contar mediante vídeos -y con gracia- cómo sacar adelante un huerto, con trucos para facilitar el trabajo y ahorrarse dinero. «Empecé en diciembre de 2012 con el blog y creo que hoy en día es uno de los principales canales de Asturias en cuanto a seguidores, el único dedicado a la huerta que tiene este nivel de visitas», presume este informático de 40 años enamorado de las plantas. Él ha sido uno de los pioneros y, visto el éxito, hay otros blogueros y youtubers que empiezan a seguir su estela. Graba sus vídeos en la huerta familiar de Las Regueras, «un espacio de autoconsumo», pero trabaja como informático en una empresa de Lugones.

«A mí siempre me habían gustado mucho las plantas. Con siete u ocho años ya puse mi primera huerta sin tener ni idea. Cuando mis padres cogieron esta finca empecé a enseñar en vídeo cómo hacía yo las cosas, sin demasiadas pretensiones», reconoce. Ahora tiene seguidores sobre todo de España, pero también de toda Latinoamérica y del resto de Europa. «Tengo alguno en Islandia, donde mis consejos no servirán de mucho, porque debe de estar todo nevado», dice entre risas. También tiene alguno en Australia.

¿El truco? «Todos mis cultivos son ecológicos y procuro que todo lo que haga sea de una forma casera, con cosas que tengamos a nuestro alcance, reduciendo costes. Siempre procuro hacer cosas de temporada y cubrir todo el proceso: siembra, trasplante, cuidados, cosecha y la obtención de semillas para ser autosuficiente». Sus vídeos más populares son los dedicados a remedios caseros para combatir plagas y mejorar el suelo. «El último que más se ha visto, el de cómo hacer un bancal para cultivar sin tierra, a base de cuchu, paja, restos de cultivos, sobrantes de la cocina...». Ahí plantó lufa -esa esponja natural que sirve para exfoliar la piel- y otros cultivos exigentes en nitrógeno, «como los guisantes y las calabazas», y se le dieron divinamente. En cuanto a las reivindicaciones de ganaderos y agricultores, cree que «lo mejor para el campo sería que los productores se uniesen para hacer venta directa de sus productos por medio de grupos de consumo, que en Madrid se empieza a llevar mucho», explica. Hoy en día se pueden crear plataformas 'on line' para que te hagan pedidos, montar cooperativas de venta... La gente tiende a alimentarse cada vez de una forma más sana. Estos productos ecológicos saben mejor y, además, sabes lo que estás comiendo», valora. «Mucha otra gente se anima a cultivar para saber de dónde vienen los productos, porque solo los conocen envasados», advierte. «La primera vez que vi una flor del guisante, que es preciosa, me quedé enamorado», recuerda. Por cierto, ¿el cacahuete nace de un árbol como las almendras o se cultiva bajo tierra, como las patatas? Pregúntenle a Toni Jardón.