Cuánto costará la vuelta al cole y claves para ahorrar

Los libros de texto y los uniformes ocupan los gastos más altos habitualmente y este curso no será excepción. Según la plataforma Banqmi, el comparador financiero de iAhorro, las familias gastarán este año por alumno 405,07 euros de media, lo que supone un incremento en el gasto de un 4,7% respecto a lo que abonaron el curso pasado (386,76 euros).

Diversos estudios tratan estos días de cuantificar el coste de la vuelta al cole y, aunque no reflejan cifras idénticas, los números oscilan en la misma franja. Un informe independiente de Idealo sitúa la inversión media en 425 euros por hijo, poco menos de la mitad del salario mínimo. A más hijos, mayor desembolso.

La plataforma educativa GoStudent calcula el gasto medio por hijo en 419 euros. El incremento de precios ha sido el más alto de los últimos cinco años. En septiembre de 2018 los padres afrontaban un gasto de 367,37 euros por hijo.

La subida en el precio de los libros no es igual para todos. Los libros en una escuela pública son un 17% más baratos que en una concertada y hasta un 39% que en una privada. «La subida podría haber sido mayor, de hasta un 6%, si no fuera por el esfuerzo que han hecho los centros públicos, que son los que deciden qué libros tienen que comprar los padres, al elegir los más baratos», detalla Antonio Gallardo, de Banqmi.

Según sus números, la subida de los precios de los libros de texto es especialmente notable en Educación Primaria (un 5,42% más que el curso pasado) y en la ESO (+4,99%), mientras que en Educación Infantil es ligeramente inferior (+3,77%). El coste medio de los libros en la primera etapa escolar es de 101,48 euros; en primaria sube hasta los 187,70 euros y en la etapa secundaria alcanza los 260,18 euros.

¿Menguan los libros digitales la factura? La respuesta del experto es negativa: «No se ven grandes diferencias de precios entre las licencias digitales y los libros de texto. La digitalización no supone ahora un ahorro para los padres, y, pese a que se temía que sí supusiera un gasto mayor, si el ordenador o Tablet que se compra es de lo más sencillo no debería haber grandes cambios».

El precio de los uniformes vendidos en los propios colegios ha subido más que el que de los comercializados en tiendas, ya que los centros escolares concertados y privados acostumbran a utilizar el ingreso como forma de financiación. Comprar un uniforme en un colegio es, según el informe, un 16,18% más caro.

-Establecer un presupuesto máximo por niño: a partir de ahí, repartirlo entre las diferentes compras, con un orden de prioridades entre lo que es fundamental adquirir y lo que resulta secundario o más un capricho. En este sentido, los libros de texto ocuparán un lugar prioritario, pero algunas prendas básicas del uniforme (en caso de necesitarlo), los babis (para los más pequeños), mochilas y material escolar se pueden adaptar más a nuestro presupuesto.

-Revisar el material del año anterior: es muy posible que cosas como la mochila, el estuche incluso carpetas o papelería puedan ser reutilizados, posponiendo ese gasto, en caso de que sea necesario comprar cosas nuevas más adelante, o eliminándolo, si puede durar todo el curso.

-El material de segunda mano puede ser nuestro gran aliado: conseguir los costosos libros de texto a un precio más reducido, siempre que estén en perfectas condiciones, puede ayudarnos a reducir el gasto de la vuelta cole notablemente. Una forma muy sencilla de encontrar ofertas es recurrir a plataformas de compraventa de segunda mano, en la que se pueden encontrar verdaderos chollos.

-Recurrir a las ofertas será fundamental: en el caso de que haya que comprar parte del material nuevo -aunque se trata de un momento peliagudo en el que todos pujan por tener el mejor producto al mejor precio-, comparar será la clave para lograr ahorrar unos euros, incluso recurrir a la venta por internet que, en ocasiones, será nuestra gran aliada.

-Acudir y revisar las ayudas o subvenciones del gobierno o de las administraciones que nos pudiesen corresponder: pues en ambos casos se pueden encontrar formas de aminorar el impacto del coste de septiembre. En este sentido, también existen numerosas becas, tales como las de comedor o de actividades extraescolares, cuyo fin es facilitar la vida tanto de los padres como de los hijos.