El mensaje de la DGT a los conductores con problemas de visión

Ocho de cada diez españoles padece algún tipo de trastorno ocular y los más comunes son la presbicia, la miopía y el astigmatismo

el comercio

Jueves, 10 de febrero 2022, 07:27

La vista es imprescindible para conducir y constituye el sentido más importante en la carretera ya que proporciona el 80% de la información relativa a la circulación. Sin embargo, ocho de cada diez españoles padece algún problema de visión. Los trastornos más habituales son la ... presbicia (42%), miopía (39%), astigmatismo (39%) e hipermetropía (18%), según detalla el informe 'La Visión en España 2020'.

Publicidad

La agu­deza visual es la definición o detalle con que se perciben los objetos, el cam­po visual el espacio total que se abarca con la visión al mi­rar a un punto cen­tral y, la sensibilidad al contraste, la capaci­dad para discriminar un objeto del fondo en el que se encuentra. Las tres conforman las capacidades bá­sicas para la conducción que se pueden ver alteradas.

Ocurre, por ejemplo, cuando el conductor padece cataratas, glaucoma o al­teraciones de la refracción como la miopía o el astigmatismo o incluso a raíz de enfermedades como la diabe­tes. La Dirección General de Tráfico (DGT) recuerda que la disminución de esas ca­pacidades pone en riesgo la se­guridad tanto del propio conduc­tor como de terceras personas.

El organismo ha elaborado una serie de recomendaciones para los conductores que sufren algún problema en su visión. La primera de ellas, utilizar gafas o lentes de contacto al volante. Para quienes usen las de cerca, es recomendable ponerse unas progresivas para observar mejor la información del tablero del vehículo. Las gafas de sol evitan el exceso de luz y hacen la conducción más confortable

Las recomendaciones de la DGT

Al au­mentar la velocidad se reduce el campo de visión por lo que es también preferible ir despacio y hacerlo por rutas co­nocidas y poco concurridas. A muchas personas les cuesta con­ducir de noche porque no distinguen bien las señales o no calculan bien la profundidad, entre otros aspectos.

Publicidad

De hecho, el por­centaje de personas con altera­ciones en la visión nocturna ha aumentado debido al envejeci­miento general de la población. El deslumbramiento se incrementa con la edad, incluso con ojos sanos, pero más aún con cataratas y en operados de cirugía refractiva.

A todos ellos, la DGT les pide que eviten ponerse a frente de un coche cuando caiga la oscuridad y también cuando existan malas condiciones de luminosidad por causas meteorológicas. Tampoco debería cogerse el vehículo tras la ingesta de algún fármaco que afecte a la visión ni cuando se acude al oftalmólogo y se dilata la pupila.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad