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César Blanco Elipe
Segovia
Jueves, 20 de abril 2023, 08:54
Cuando Rufo Sanz llegó este martes por la mañana a la nave que tiene el Banco de Alimentos de Segovia en el polígono de Hontoria, se le saltaban las lágrimas. Impotencia y rabia, pero sobre todo tristeza. Los empresarios de la planta contigua le habían ... avisado. La puerta estaba mal cerrada. El vecino asomó la cabeza y le alertó. «¡No sabes lo que tienes aquí!», le avanzó el desastre. Los ladrones habían asaltado la nave en la madrugada del lunes al martes. Vaciaron estanterías enteras. «Se han llevado la leche, el aceite, conservas...», cuenta el presidente de la organización sin ánimo de lucro, quien añade que sustrajeron «lo más caro».
Este revés «es un palo» para la labor humanitaria que desarrolla el Banco de Alimentos, se lamenta Sanz. En torno a 1.800 o 1.900 personas reciben el auxilio de la entidad. El responsable calcula que los productos robados equivalen a «entre tres y cinco toneladas» de comida que no va a llegar a las asociaciones que hacen de intermediarias para ayudar a quienes no tienen qué llevarse a la boca. Este mismo martes tenían cuatro entregas y «les llevamos lo que pudimos».
Los malhechores también les han robado el furgón para las recogidas y los repartos. Cuando Rufo Sanz subió a la oficina que tiene la entidad en la nave se encontró con todo revuelto y destrozos materiales. Los ladrones se afanaron un ordenador portátil y una impresora que estaba sin montar. Los daños materiales son cuantiosos, mientras que la cantidad de alimentos sustraída está valorada en unos 15.000 euros.
Dentro del doble drama que supone el robo, por la sustracción de los alimentos y porque son productos que no van a llegar a los necesitados, Sanz agradece la colaboración que ya están prestando algunas empresas, supermercados, así como otros bancos de otras provincias. Tanto la Subdelegación del Gobierno como la Gerencia de Servicios Sociales o el Ayuntamiento de Segovia, entre otras instituciones, también han manifestado su apoyo y su predisposición a solucionar el desastre.
Rufo Sanz
Presidente del Banco de Alimentos de Segovia
A pesar del golpe, la veintena de voluntarios «han dicho que tiremos para adelante». Ante una contrariedad como la sufrida, Rufo Sanz admite que «te quedas noqueado y pasa factura anímicamente; pero vamos a intentar superarlo». Por delante, tiene una cita, ya tradicional en el calendario benéfico de Segovia, que es la recogida de primavera, el 4 y 5 de junio.
En esta edición la causa manda y serán bienvenidos los donativos de dinero en metálico que se hagan en caja y que se transformarán en alimentos demandados.
Además, la Federación Nacional de Bancos de Alimentos (Fesbal) ha tenido conocimiento del robo sufrido por su delegación segoviana y ha abierto una cuenta para que quienes lo deseen contribuyan con su dinero a paliar las carencias que han causado los delincuentes. El número de la cuenta es ES40 2100 6106 8913 0154 3977.
Las muestras de generosidad se suceden. Por ejemplo, el Ayuntamiento de Torrecaballeros ha organizado una campaña «urgente y extraordinaria» de recogida de alimentos para abastecer al banco solidario. El alcalde, Rubén García de Andrés, concreta que el punto para depositar los productos estará ubicado en el Ayuntamiento, de 8 a 15 horas, desde este jueves 20 y durante una semana.
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