Coronavirus | 2.876 sanciones por incumplir desde su implantación el estado de alarma

Con esa hoja de ruta, efectivos policiales realizaron controles a vehículos particulares, pero también en el transporte público. Los agentes accedían al interior de los autobuses para solicitar a los viajeros que les mostrasen el justificante que les permite desplazarse a sus lugares de trabajo; en caso de ir a otros lugares, tenían que justificar la necesidad del viaje.

Después de un fin de semana con cifras de movilidad «casi testimoniales» en España, como indicó el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, un porcentaje de asturianos tuvo que regresar a las calles para retomar sus actividades profesionales. Menos que antes del último decreto, pero en número suficiente como para que se produzcan aglomeraciones indeseadas.

El objetivo es frenar la curva de contagio e intentar eliminar conductas irresponsables, como las que se han reproducido en el nuevo escenario social en las últimas semanas. Desde que se decretase el estado de alarma, la Policía y la Guardia Civil han efectuado 2.876 propuestas de sanción en Asturias, según datos de la Delegación de Gobierno. Más de un centenar y medio de infracciones al día que contribuyen a alcanzar las 215.409 multas que se han puesto en territorio español por quebrantar el confinamiento establecido en la segunda quincena de marzo.

De las 1.839 personas detenidas, diecinueve corresponden a acciones policiales llevadas a cabo en el Principado tras la implantación de un estado de alarma que, a pesar de estas excepciones, ha originado un clima de responsabilidad social traducido en una notable reducción del trasiego de gente en las calles. Con los vehículos limitados a un tercio de su capacidad, tras las reducciones en los servicios de autobuses urbanos en las ciudades asturianas con frecuencias más dilatadas, desde el Ministerio se pretende estructurar las medidas con un plan de transportes más restrictivo.