Cardenal Müller: «Los divorciados que se vuelven a unir están en pecado mortal»

El cardenal Gerhard Ludwig Müller, Prefecto para la Congregación para la Doctrina de la Fe, el guardián de las esencias de la fe católica, ofreció este mediodía en Oviedo una conferencia titulada '¿Qué podemos esperar de la familia?', un acto que se organizó con motivo de la presentación del libro 'Informe sobre la esperanza' y que tuvo lugar en el salón de actos del Seminario Metropolitano.

En él estuvo acompañado por el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, además de por otros seis obispos (Pamplona, Burgos, Santander, Astorga, Lugo y Orense) y por el administrador diocesano de Palencia, pero antes contestó a algunas preguntas de los medios de comunicación, ante los que afirmó que la idea de la familia está en crisis y que la Iglesia no puede legitimar las nuevas uniones entre personas divorciadas toda vez que van contra los diez mandamientos de Dios.

Y, así, el cardenal alemán precisó que, aunque los divorciados no son excomulgados canónicamente, hay otro tipo de excomunión, la sacramental. Y, por eso, no pueden comulgar antes de que se regule su vida y de recibir el sacramento de la penitencia, toda vez que se encuentran en pecado mortal y necesitan el reconocimiento del perdón. Porque el pecado es algo que va contra el amor de Cristo, subrayó.

Defensor, asimismo, de que la Iglesia no puede reconocer a las parejas homosexuales, puesto que el matrimonio entre el hombre y la mujer está enraizado en la creación, Müller también se refirió, a preguntas de EL COMERCIO, a la querella que investiga los crímenes del franquismo después de que la jueza argentina María Servini de Cubría haya pedido colaboración al Vaticano para que aporte toda la documentación que tenga relativa a las relaciones entre la Iglesia católica y el Estado español entre el 17 de julio de 1936 y el 15 de junio de 1977, el periodo que abarca la investigación, que comenzó en 2010.

Al respecto, aseguró que deberían también investigarse los crímenes contra la Iglesia, contra tantos laicos, sacerdotes y obispos que perdieron sus vidas. Y, así, acusó a determinados grupos de querer manipular ideológicamente y pidió que en España haya una reconciliación.

No se debe utilizar la historia para crear nuevos líos, sentenció Gerhard Ludwig Müller ante Sanz Montes, a quien la jueza argentina reclama información , ya que entre los denunciantes hay nietos de desaparecidos y víctimas directas de la represión y la tortura del régimen de Franco. Entre ellos, varios asturianos.

Y si el arzobispo de Oviedo no se pronunció al respecto, Müller llamó a no reabrir las viejas heridas, por lo que instó a todos los partidos democráticos a trabajar juntos en favor del bien común.