Senderismo por Asturias: en Caso
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Senderismo por Asturias: en Caso
Ruta a Vega Baxu, una majada a más de 1.000 metros en el Parque Natural de RedesHe aquí un sendero sencillo, cómodo, sin pérdida y de no muchos kilómetros que, sin darse ninguna importancia, va ascendiendo de forma ligera al tiempo que se introduce por zona salvaje, de brañas y de bosques, en pleno Parque Natural de Redes.
En el trayecto reinan los robledales, los verdes intensos, los ríos y arroyos que discurren a la búsqueda del Nalón, las cabañas, las fuentes y abrevaderos, los bosques viejos de hayas, la visión del Tiatordos… una amalgama de elementos perfectos que, unidos, conforman una excursión preciosa.
El destino, una majada: añeja, amplia y bella. La llaman Vega Baxu. Se ubica a más de 1100 metros de altura, engalanada de cabañas y de una alfombra de suave verde. Y puede que no sea una cima, que no suponga un paseo arriesgado ni excesivamente largo y hasta que estemos acostumbrados a transitar muchas, muchas majadas… pero Vega Baxu tiene prendido «un algo» que la hace especial y única; un «no sé qué» que la hace muy bella; un punto hogareño y salvaje que la hacen, sencillamente, inolvidable.
Tipo de ruta: Lineal (ida y vuelta por el mismo trayecto)
Dificultad: Fácil
Distancia: 11 km
Tiempo: 4 horas
Desnivel aproximado: 358 m
En definitiva, Vega Baxu es un destino perfecto para un paseo senderista bonito, cómodo y asequible. Su amplia pradería y su posición la convierten en un lugar estupendo si lo que se busca es tranquilidad y un buceo sin complicaciones a la montaña más pura; el sendero que conduce hasta ella no tiene pérdida ninguna y discurre siguiendo, todo el rato, una estela de pastores marcada durante cientos de años. Y hasta sus alturas, a más de 1000 metros y con aires montunos, se llega enseguida (en un par de horas a paso tranquilo) transitando entre bosques, majadas, montes y brañas cargados de mil encantos.
Se empieza a caminar desde la aldea de Pendones, punto de arranque clásico para hacer cimas míticas como el Tiatordos o el Maciedome. Se puede dejar el coche en un aparcamiento amplio para caminar 50 metros por carretera y coger el desvío que señala PR AS 65, a Vega Baxu.
El mismo camino también está marcado como GR, ya que coincide con el recorrido «Camín Real de Tarna y del Sellón» (o Ruta del Sellón) que atraviesa el Parque Natural de Redes desde el Puerto de Tarna hasta más allá de la Collada de Arnicio, y llega hasta Llozana (cerca de Infiesto).
Siguiendo las marcas PR, se coge una pista de cemento que primero baja y que, tras cruzar el río Pendones, gira a la derecha para empezar a subir: se trata de la zona de la senda más dura de todas, en la que mayor desnivel se salva. Aunque, no obstante, se va ganando camino de manera fácil.
En la subida, se contempla la cara occidental del Tiatordos (conocido como 'la montaña perfecta'): se levanta colosal detrás de la foz de Palombar, luciendo como rey en un trono.
La subida progresa avanzando entre bosques y visitando majadas: desde las de Gargasa y Pandevilla se pueden disfrutar bellas panorámicas de picos de renombre como La Senda o el Campigüeños. Y todo lo que queda es dejarse llevar, sin prisa, hacia los adentros de Redes.
Conquistadas las primeras majadas, el sendero llanea, avanzando ahora por las faldas del monte durante unos tres kilómetros. Atrás siguen quedando nuevas zonas de cabañas, el desvío que conduce al Maciedome, fuentes, bosques de robles y praderías. Alrededor destaca el verdor, montes de caliza verticales, intensos aromas frescos, el aire limpio, el concierto de agua y trinos, fuentes y abrevaderos de piedra…
Tras llanear un largo trecho, el sendero se encuentra ahora con el arroyo Corralín: está formado por aguas nacidas en lo alto de Valloseru y desciende dibujando eses por el valle, visitando brañas y bosques antes de llegar a fundirse con el Nalón, mucho más abajo. Sin perder de vista el curso del agua, el camino comienza a subir levemente, en llevadero ascenso, adornado por tramos de hayedos y pequeñas majadas con cabañas.
Y así, casi sin darse cuenta, se llega caminando a Vega Baxu, que aparece repentina pero bien distinguible: por amplitud, por ubicación, por el paisaje, por esa magia que la recorre, por sus rincones cuidados, por su luz… bien vigilada por el cordal Valloseru que hace de muralla con tierras ponguetas.
Sólo hace falta un vistazo para encontrar un rincón, un trozo de hierba, un árbol con buena somba en el que apetece sentarse. Sólo hace falta un cómodo paseo de menos de dos horas para llegar a este oasis, en medio de esta agreste locura natural de verdes y relieves. Sólo es necesario caminar unos kilómetros bien cómodos por recovecos de Caso para alcanzar esta majada, a más de 1000 metros, y olvidarse del mundo.
Para regresar, simplemente hay que dar media vuelta: volver por dónde vinimos, sin prisa ni pérdida, recreándose en cada paso con toda la belleza, la magia y la paz que caracterizan (siempre) al grandioso Parque Natural de Redes.
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Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
José A. González y Álex Sánchez
Clara Alba y José A. González
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