Alex Txikon vuelve al Everest

La noticia la compartía el mismo Txikon hace pocos días a través de sus redes sociales: «La pandemia ha traído muchos cambios y también ha supuesto un punto de inflexión para mí. Hemos disfrutado mucho en el Manaslu este invierno con el formato de expedición que veníamos desarrollando hasta ahora, pero creo que ha llegado el momento de darle un empujón al proyecto y afrontar nuevos retos. Así mañana volamos de nuevo a Nepal, con un doble objetivo, por un lado, tratar de hacer cumbre en el Everest, y por otro, seguir apoyando a un país que se ha volcado con los turistas, y expedicionarios y que ahora ha visto cómo se paraliza todo», ha explicado Alex Txikon en uno de sus vídeos compartidos en YouTube.

Expedición que en este caso será más reducida de lo que vienen siendo el resto de proyectos de Txikon y en la que solo estará acompañado por el periodista Iñaki Makazaga, y el fotógrado Sendeoa Elejalde. Aún así el vizcaíno tendrá que compartir su ascensión con los cientos y cientos de alpinistas que cada primavera se agolpan en esa ruta, que también sueñan con ascender al techo del mundo y que podrían entorpecer la ascensión del vizcaíno.

Una montaña que el alpinista ya intentó el invierno pasado y que en la historia del alpinismo ya acumula más de 10.000 ascensiones totales, pero de las cuales sólo son 200 las que se han logrado sin ayuda de oxígeno artificial y entre las que esta primavera también podría sumarse la de Killian Jornet (que en su caso hará por la arista oeste). Esta vez Txikon dispondrá de permiso hasta el 25 de mayo y apenas estará tres semanas en el Campo Base, algo que podrá afrontar gracias a la aclimatación de su reciente intento invernal al Manaslu.

De conseguirlo, Txikon lograría ascender su duodécimo ochomil diferente y estaría a tan solo dos más (el K2 y el Kangchenjunga) de conseguir los catorce ochomiles. Un reto que a pesar de no atraerle, estaría más cerca que nunca de poder conseguir.