Ziganda mantiene intacta su confianza en Sangalli y Luismi

El Real Oviedo no está contando este año con la mejor versión de jugadores que han sido claves en el equipo de José Ángel Ziganda desde que este aterrizara en la capital asturiana. Es el caso de hombres como Luismi Sánchez, al que la covid y las lesiones han alejado de la titularidad, y Marco Sangalli, que además de perderse cinco partidos por lesión tiene la competencia del mejor Viti Rozada de los últimos años. Nada de eso ha quebrantado la confianza que el técnico navarro tiene depositada en ambos y ayer lo dejó de nuevo patente. «El Luismi que conocemos y que hemos tenido aquí antes todavía no está. Nos da porque no hay gente en su demarcación y por ser un jugador específico, pero aún no está al nivel del jugador que todos guardamos en la retina», explicó respecto al pivote oviedista, que no ha vuelto a ser titular desde que se lesionase a finales de septiembre.

Lo importante, recalcó el propio Ziganda, es que Luismi «no ha venido para tres meses, si no para dos años», y eso es algo muy distinto a las prisas que persiguen a los entrenadores. «Tiene mucho amor propio y no tenemos ninguna duda de que volverá a ese nivel. Hay que estar tranquilo», sentenció el entrenador navarro.

Algo así ocurre con un Marco Sangalli que fue durante las últimas dos temporadas el jugador de campo más utilizado por el técnico azul. «Este año no está teniendo ese protagonismo, no firma asistencias ni marca, pero siempre suma. Un mal día de Sangalli, en muchos casos, es un día normal e incluso bueno de otros», comentó el de Larráinzar sobre un jugador «muy solidario e importante para el equipo».

El que está de vuelta, junto con Jirka, es Alejandro Arribas. El central regresa tras su lesión justo a tiempo para cubrir la posible vacante que dejen en defensa cualquiera de los zagueros. Tanto Calvo como Costas jugarán apercibidos ante el Amorebieta.