Ziganda: «Tenemos muchos jugadores y más opciones para elegir»

El titular del banquillo azul se refirió ayer a esta situación, que asume como un reto normal en su profesión y que espera que sirva para que el nivel competitivo del equipo suba para tratar de acercarse lo más posible a la zona alta de la clasificación.

Ziganda tiene claro que «sea la plantilla larga o corta siempre hay jugadores que participan más, menos o poco» y que, ante esa circunstancia, debe concienciarles para que ofrezcan el máximo en los entrenamientos y estén preparados para el momento en el que les llegue su oportunidad. «Por número será imposible meter a todos, pero intentamos concienciar a todo el mundo de que lo importante es trabajar en el día a día y que todos en la vida vamos a tener oportunidades», dijo.

Además, el entrenador navarro lanzó un mensaje a sus futbolistas al recordarles que «cada semana cambian las cosas y uno no sabe cuándo va a tener su oportunidad, bien por lesiones, bajas o momentos de forma» y ante ello, insistió, cada jugador «tiene que estar preparado».

En este sentido, Ziganda entiende que su obligación como entrenador es tratar de «rodearles de un buen ambiente de trabajo, de respeto y de saber estar». Lo que les pide a los suyos es que sean «lo suficientemente duros y maduros para engancharse en el día a día, porque el domingo juegan entre 11 y 15 y somos 24». Además, como viene diciendo desde su llegada al banquillo ovetense, «el día a día es lo más importante, la profesión no es solo el domingo, son 7 días a la semana y 24 horas al día».

Además, el entrenador oviedista no ve en el hecho de tener 24 jugadores un inconveniente. Al contrario. Lo considera muy positivo. «Tenemos muchos jugadores y eso está bien, porque tenemos más opciones para elegir», afirmó. Lo que no oculta es que no todos van a tener el mismo protagonismo. «Es cierto que hay un bloque, al 80 o 90%, que viene jugando con continuidad y siendo bastante regular». También recordó que, en función de las bajas, las tarjetas y los momentos de forma, valorará «si entran unos jugadores u otros» y esto, para él, «es bueno».

El míster cree que eso es algo que pasa en todos los clubes. «Las plantillas están para eso. Hay que respetar el espacio de cada uno y hay momentos en los que les toca jugar a unos y esperar a otros y viceversa», dijo y añadió que «es la ley del fútbol y de la vida».

Ziganda apeló a la profesionalidad de todos los componentes de la plantilla para asumir su rol. «Creo que todos somos lo suficientemente maduros para saber que en todos los equipos hay 13, 14 o 15 jugadores que participan más, 3 o 4 que participan menos y 3 que participan muy poco», explicó el técnico, que también considera que «el entrenador es consciente de eso y tiene que saber lidiar con esa tarea de intentar tener a la gente involucrada y concienciada de que esto es un trabajo diario».

El mensaje que el entrenador mandó a los suyos para lo que queda de temporada es que «todo lo que trabaja cada uno se lo da a uno mismo». «Hay momentos de debilidad o flaqueza cuando las cosas no salen bien tanto a nivel individual como de grupo», hizo hincapié. Es en los momentos complicados cuando los entrenadores tienen que ser «la cabeza de grupo del equipo» , insistió en que «cada día tenemos la oportunidad de hacer algo que es lo que más nos gusta» y concluyó que «hay que ser fuerte y racional porque somos unos privilegiados».

Entre los nuevos, el único que no ha debutado es el defensa central Rodri Tarín, al que el entrenador ve en condiciones de jugar en cualquier momento, pero le recordó que «viene a un equipo con unos centrales que están dando buen nivel y Christian también está esperando». «Pero Tarín está en perfecto estado y se ha adaptado perfectamente a los entrenamientos y a la idea del equipo», puntualizó. «No se nota para nada que es nuevo y si hay que tirar de él no habrá ningún problema», añadió el entrenador del Oviedo.