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R. j. gArcía
Miércoles, 23 de septiembre 2020, 01:09
Las alternativas para José Ángel Ziganda han aumentado sesiblemente para afrontar el encuentro de la próxima jornada ante el Espanyol. El técnico navarro contó ayer, en la vuelta a los entrenamientos del equipo con los dos últimos fichajes del equipo, Blanco Leschuk y ... Gorgi Aburjania. El técnico no podrá contar con Rodri y está pendiente de la evolución de la lesión de Viti.
El entrenamiento de ayer, previsto para las 12.30, ya que los jugadores tuvieron que pasar test, comenzó media hora después, ya que hubo sesión de vídeo para analizar el encuentro ante el Mirandés. Una vez en el campo antes del inicio de la sesión hubo el pasillo de bienvenida a los dos nuevos y también al joven delantero del filial Javi Cueto, por su debut con el primer equipo en Anduva.
La llegada de Blanco Leschuk y Aburjania, con la puesta a punto de Nahuel, que completará su segunda semana de entrenamiento, así como la mejoría de Sangalli, que después de su positivo por covid-19 ya está al 100% y cuenta con muchas opciones de estar el once titular en la próxima jornada.
La única línea del equipo que lleva cerrada desde la pretemporada es la defensa, que no parece que se vaya a mover salvo por la ausencia de alguno de los cuatro titulares habituales: Nieto, Grippo, Arribas y Mossa. En el banquillo siguen esperando su oportunidad Carlos Hernández, Christian Fernández y Lucas, mientras que el club sigue buscanso una salida a Diegui Johannesson.
Donde el técnico ha ganado recursos es en la medular, ya que Aburjania puede ser el complemento para cualquiera de los otros tres: Tejera, Édgar González y Jimmy. La presencia de Aburjania puede dar al centro del campo un carácter más ofensivo, en función de que haga pareja con Tejera, que es de construcción, Edgar de contención, o Jimmy, que es pivote mixto, de juego corto y buena posición en el campo.
También se espera que la disponibilidad de Nahuel Leiva y Sangalli de más profundidad por las bandas. El primero se estrenó en Anduva y mejoró la velocidad en ataque del equipo. Una de las alternativas que maneja el técnico es que pueda entrar en la banda izquierda, lo que le permitiría liberar a Borja Sánchez, para jugar en la mediapunta, una posición en la que jugó la mayor parte de su carrera. El que parece que por el momento no ha convencido al entrenador es Cedric, que jugó unos minutos ante el Cartagena, pero que no salió ante el Mirandés, pese a que el equipo necesitaba una reacción con el marcador en contra. También va a tener más difícil entrar en el equipo el canterano Viti, titular en las dos primeras jornadas de Liga.
Sin embargo, el más esperado es el delantero Blanco Leschuk, por el que el club ha hecho un importante esfuerzo económico en busca del gol que ha perdido el equipo con la marcha de Ortuño y Bárcenas. El argentino, aunque no es un delantero puramente goleador, en su temporada en el Málaga marcó nueve goles, trabaja bien de espaldas a la portería y abre espacios para los compañeros.
En cuanto esté disponible Ziganda podrá volver a jugar con dos delanteros, que es el sistema que más le agrada, ya que hasta ahora no pudo hacerlo, por la escasez de efectivos y optó por Javi Mier como mediapunta por detrás de Obeng. Precisamente Obeng puede ser el más beneficiado por la llegada de Blanco Leschuk, ya que parece que son complementarios, uno más posicional, el argentino, y el otro, el de origen ghanés, más dinámico y de velocidad para aprovechar los balones sueltos.
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