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El Real Oviedo regresó al trabajo este martes tras dos días de descanso y lo hizo, como el resto de asturianos, peleando contra las inclemencias de las borrascas Gerard y Fien. Las intensas lluvias que se han registrado en las últimas horas afectan de manera especial a las instalaciones de El Requexón, que no es la primera vez que se inundan por este motivo, y es por eso que, aunque este martes han trabajado en ellas, los azules estudian ya el posible traslado de la sesión del miércoles a otro escenario.
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El riesgo de desborde del río Nora, unido a lo encharcados que están los campos, ha motivado que desde primera hora del martes se trabaje en ese cambio de cara a poder preparar su visita al Huesca (domingo, 18.30 horas) en las mejores condiciones. Aunque se han sondeado opciones de hierba natural en la propia capital, la más factible es la de las instalaciones de La Morgal (Llanera).
En la primera sesión de la semana Álvaro Cervera contó con las bajas ya sabidas de Javi Mier, Borja Sánchez y David Costas, y a ella se sumó la de Hugo Rama, cuya lesión ya avanzó el propio Cervera el viernes tras ganar al Alavés. Jimmy, que salió con el grupo e inició el trabajo con normalidad, trabajó a menor ritmo la mayor parte de la presión debido a las molestias que motivaron su cambio en el último partido de liga.
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