La sequía goleadora lastra al Real Oviedo

La poca producción ofensiva del equipo también queda patente en el hecho de que el Oviedo no ha sido capaz hasta ahora de marcar más de un gol en ninguno de los 22 encuentros disputados hasta el momento. El conjunto ovetense no ha logrado marcar en ocho de los partidos que ha disputado hasta ahora.

Tras el encuentro del pasado sábado en Andorra, Álvaro Cervera igualó a Jon Pérez Bolo en el número de encuentros dirigidos, con once cada uno. La llegada de Cervera sí hizo mejorar el balance goleador, ya que en la etapa de Bolo el equipo solo logró cinco goles, mientras que la del guineano suma nueve.

Lo que también ha quedado patente es que la responsabilidad del gol en el equipo ovetense ha recaído fundamentalmente en un único jugador, el delantero Borja Bastón que, ha marcado ocho de los catorce goles que lleva el equipo. El delantero madrileño, que la pasada temporada llegó a los 22 goles, esta temporada está por debajo de la cifras que llevaba la pasada, pero sigue siendo la referencia goleadora. Borja Bastón logró esta campaña la mitad de sus goles, cuatro, desde el punto de penalti.

El principal problema del equipo es que el resto de componentes del equipo no están logrando ver portería como se esperaba. Por ejemplo, Samuel Obeng, que la pasada temporada marcó ocho goles, en la presente solo suma uno. En segundo máximo goleador del equipo esta temporada es Sergi Enrich, que suma dos goles. El resto de tantos están repartidos entre dos de los defensas centrales, Dani Calvo y David Costas, un centrocampista, Montoro, y el otro lo marcó Obeng.

En la nómina de goleadores de esta temporada no hay ninguno de los jugadores de banda del equipo, ni otros que tienen clara vocación ofensiva, como son los casos de Borja Sánchez, Marcelo Flores, Hugo Rama o Koba Lein, que no se han estrenado.

En la Copa del Rey también fue el máximo goleador Borja Bastón, que logró dos goles ante la Gimnástica de Torrelavega, mientras que Sangalli hizo el otro en la prórroga. El defensa central Oier Luengo fue el autor de gol de la victoria ante el Granada, en una de sus pocas titularidades esta temporada.

En la etapa de Bolo, en la que los registros goleadores son peores, la idea futbolística del entrenador era más ofensiva, ya que el técnico apostaba por partidos de ida y vuelta, buscando tener más llegadas al área contraria, sin embargo, en muchos de los encuentros faltó acierto goleador y producción ofensiva.

Los números en ataque mejoraron con Cervera, pese a que el técnico apuesta por otro tipo de fútbol, basado en tener el control defensivo de los partidos y que sucedan pocas cosas. Sin embargo, en este contexto el equipo ha sido capaz de aprovechar mejor las ocasiones de las que dispuso y con ello llegó la reacción en la clasificación.

Por todo lo anterior, una de las cosas que el equipo está buscando en el mercado de invierno es un par de jugadores para el ataque. La intención es que se incorpore un jugador de banda y también un cuarto delantero de características diferentes a los que hay en la actualidad.

La idea de Cervera es que el equipo llegue por las bandas y se pongan balones al área, donde se confía en la efectividad de Borja Bastón. Ya ha llegado un jugador para la banda, Leo Sequeira, pero se está buscando otro para la izquierda.

Además, el técnico busca un delantero que tenga entre sus virtudes la velocidad, para aprovechar los contraataque y los posibles robos de balón en el centro del campo.

La mejoría de los resultados del equipo pasará, en buena medida, porque mejore el balance goleador del equipo en los encuentros que restan. Eso haría poner en valor la seguridad defensiva que el equipo está demostrando, con la salvedad del partido ante el Andorra, en el que el equipo recibió tres goles y varias oportunidades claras.