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R. J. GARCÍA
OVIEDO.
Jueves, 19 de septiembre 2019, 02:38
La competición no da tregua y Javi Rozada ofreció ayer su primera ruedad de prensa como entrenador del primer equipo, justo el día previo a su debut en el banquillo. El técnico, que desveló que cuando el domingo le llamaron no dudó y ... el acuerdo fue muy rápido, reconoció que siente la responsabilidad del cargo por la historia del club y se marca como objetivo «intentar conectar con la gente, el mejor regalo que quiero llevarme es conseguir que esa gente que lo sufre y lo siente en la grada se sienta identificada con el Real Oviedo».
Por eso promete trabajo para lograr que «la afición vaya con la cabeza arriba y orgullosa de lo que vea en el Tartiere». Además, se mostró agradecido a Sergio Egea por el trato que le dispensó y recordó que gracias al técnico argentino el equipo está ahora en el fútbol profesional.
No obvia que después de tres derrotas «es importante ganar», pero no oculta que también será clave que sean «ambiciosos, valientes y sepan manejar los momentos del partido», en definitiva tratar que el equipo tenga «unos hábitos similares a los del filial». Eso, considera, que es «lo más importante, por encima del resultado», ya que recuerda que aunque «es importante puntuar, pero quedan 37 partidos y vamos a sacar muchísimos puntos».
No oculta que espera que el equipo sea distinto al que se viene mostrando hasta ahora «uno siempre intenta meter su sello» y en lo que quiere que se advierta es en que «seamos valientes y ambiciosos. Saldremos desde el primer minuto a por el rival. Eso es lo que quiero transmitir, eso se verá».
En lo que se ha centrado en los tres entrenamientos que ha tenido, afirmó que fue el tema emocional «Había que trabajarlo porque los jugadores tenían dudas», dijo antes de recordar que esta plantilla «luchó por el 'play off' y se han traído jugadores que han destacado en Segunda División. Ha venido gente de Segunda B, una categoría durísima». «Tenemos una plantilla muy buena», subrayó.
Respecto a su llegada al banquillo explicó que desde el club se le dijo que «el equipo está en una dinámica mala, a los jugadores con dudas» y le han pedido que «saque el máximo de ellos y que sea yo mismo. Una vez que el club me dice eso el acuerdo fue muy sencillo. Tengo que hacer lo mismo que hice en el filial». Además, entiende que «los entrenadores del filial están para esto, trabajar y si tienen la oportinidad, aprovecharla. No hay cosa mejor que tirar de técnicos de la casa».
Su idea de juego, profundizó, «es que no haya un sistema definido, manejo varios. y trato de adaptarme a cada contexto y a lo que el partido pide». También asegura que contará con jugadores del filial como «Riki, Steven, Samu, Josín, Viti, los gemelos (Jorge y Javi Mier) y entre todos sacaremos esto adelante, estoy seguro».
En cuanto a nombres concretos, como Borja Sánchez, dijo que «ha tenido suerte porque viene un entrenador que le va a apretar. Él no se autogestiona, depende mucho del entrenador porque es débil de cabeza. Buscaré todo el fútbol que tiene, que es espectacular, y como se suelte puede levantar al Tartiere». También elogió a Ibra, con el que dijo que cuenta por su actitud.
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