El delantero del Real Oviedo Samu Obeng recibió este viernes el premio Digi al jugador más rápido del mes, título que se ganó en la jornada 10 frente al Huesca tras alcanzar los 34,12 km/hora. El ariete, que no puso paños calientes ... a la situación que atraviesa el equipo, reconoció que el vestuario está «jodido, pero no hundido», y se mostró convencido de que con más tiempo para trabajar el balón parado cambiarán las tornas.
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Sobre los cambios para bien que ya ha experimentado el equipo en cuanto a juego -más intensos y mejores en el repliegue y en la presión-, y sobre la necesidad de jugar más concentrados en los últimos minutos también habló el ghanés, contento en lo personal por haberse reencontrado con el gol. «Preocupados claro que estamos, porque al final estamos en una zona de la tabla que es jodida, pero tampoco nos estamos volviendo locos: hay mucho tiempo para estar arriba y para estar abajo. Lo vamos a solucionar», concluyó el oviedista.
«Estamos jodidos porque fue duro caer, más aún por el minuto en que llegó su gol, pero tampoco tenemos mucho tiempo para lamentaciones porque el domingo tenemos otro partido y otra oportunidad para intentar sacar los tres puntos».
«Al final el míster incide en lo mismo que los jugadores, en que sacamos cosas positivas porque al final llevamos dos jornadas compitiendo bien, pero que se nos están yendo los partidos por una misma razón: el balón parado. Encima en los últimos minutos de partido, que es cuando más concentración se necesita y nos hace pasar de llevar algo positivo -aunque sea un punto- a no llevar nada. Y eso jode. Pero sí que sacamos muchas cosas positivas de estos dos últimos partidos, en los que creo que hemos competido bien».
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«Llevamos poco tiempo con el míster y la verdad que en cuanto a juego se ve otro equipo diferente al de otras jornadas, pero a balón parado no nos ha dado tiempo a trabajar mucho. Es una fase que yo creo que debemos mejorar mucho, sobre todo defensivamente, y yo creo que ahora con más tiempo, lo vamos a solucionar».
«El partido del domingo lo afrontamos igual que si no hubiéramos encajado en el último minuto. Lo vamos a afrontar igual que los otros partidos, sabiendo que no es un filial, y con total naturalidad».
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«¿Cansancio en el último tramo? Bueno, se nota también la plantilla, que estamos en el tema de recambios estamos justos al tener muchas bajas, y si que se puede notar».
«La intensidad es el mayor cambio, y también a la hora de replegar el bloque y saltar luego a la presión».
«Me siento bien, contento de volver a reecontrarme con el gol -que llevaba mucho sin marcar-, y sí que me siento más cómodo de nueve, pero si el equipo me necesita en banda, en banda jugaré».
«Preocupados claro que estamos, porque al final estamos en una zona de la tabla que es jodida, pero tampoco nos estamos volviendo locos: hay mucho tiempo para estar arriba y para estar abajo. No estamos hundidos».
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«En casa tenemos que ser uno junto a la afición, y ser un fortín. Todos los partidos son importantes pero este si cabe aún más por la situación en la que estamos».
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