Real Oviedo | Buenas palabras en las despedidas de Alfonso, Champagne, Ibra y Lolo

El primero en poner por escrito sus sentimientos tras saber que no continuaba fue Nereo Champagne. El capitán azul, que vistió dos temporadas la camiseta oviedista, se despidió con un «eternamente gracias» a la entidad azul y quiso destacar que para él esta despedida «no es un adiós sino un hasta pronto, porque los sentimientos se quedan».

Ibra parafraseó a su hasta ahora compañero de equipo porque su marcha será, literalmente, «un hasta luego». El senegalés, totalmente integrado en la ciudad, se considera un oviedista y un asturiano más y así lo ha demostrado en las dos temporadas en las que se ha contrastado como uno de los futbolistas más cercanos y queridos por la afición. «Mi Real Oviedo, mi Asturias, mi gente, no tengo palabras para deciros lo orgulloso que estoy de poder haber vestido esta camiseta. Os quiero, hoy más que nunca, a todos los oviedistas y a mi familia asturiana», señaló el delantero africano.

Lolo González, a pesar de no haber tenido la continuidad que le hubiera gustado en el club azul, coincidió con sus compañeros en valorar «el gran club y la gran ciudad» a la que perteneció esta dos últimas campañas. «Imposible irme sin despedirme de esta gran afición, me voy sin reproches porque he podido irme hasta en tres ocasiones y finalmente estoy aquí, celebrando la salvación. Espero y deseo que os vaya bien en el futuro porque este club, esta afición y esta ciudad sois de Primera División», concluyó el mediocentro gaditano.

El último en plasmar en redes sociales sus emociones tras cerrar la etapa como carbayón fue el que este año ha sido el tercer portero de la plantlla, Alfonso Herrero. El toledano era quien más llevaba en el club y confesó irse «enamorado de Asturias y con una mochila enorme de emociones y sentimientos» tras cuatro campañas en el Real Oviedo. «Gracias a todos los que me apoyaron y a los que estuvieron ahí hasta el último día, en las buenas y en las malas. Me voy con la cabeza alta y habiendo dado todo de mí», escribió el propio Alfonso. El portero agradeció al club «la oportunidad de crecer como futbolista y como persona» tras haber llegado en 2016 para rodarse en el Vetusta y subir luego al primer equipo, donde finalmente no logró asentarse y hacerse con la titularidad.