MARÍA SUÁREZ
OVIEDO.
Lunes, 26 de agosto 2019, 04:01
El portero del Real Oviedo, Alfonso Herrero, analizó el primer partido en casa tras analizarlo en grupo en la primera jornada de trabajo. Un empate por la mínima ante el Lugo que si algo deja es 'mal sabor de boca' por el tanto ... encajado en el añadido.
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«Fue un partido complicado, porque tuvieron mucha posesión y psicológicamente es muy exignte jugar contra un equipo que quiere tanto el balón. Aguantamos los envites, por momentos hicimos una buena presión, pero tenemos que mejorar en los últimos tramos de partido», comentó el jugador azul.
Alfonso reconoce que en los últimos minutos la falta de concentración le está pasando factura al equipo, si bien matiza que se trata de una situación puntual y que se puede corregir.
«Hay cosas que mejorar, sobre todo que no se nos escapen esos puntos al final, pero yo vi al equipo muy metido todo el partido. Es verdad que el gol llega en una segunda jugada y tras un disparo desde la frontal, pero no hubo grandes faltas de concentración. Son aspectos a pulir. Miraremos nuestros fallos y seguiremos adelante», aclaró el portero carbayón.
Respecto a ese gol encajado, tiene claro que son cosas que marcan las sensaciones finales de un partido en el que el toledano fue de lo mejor del equipo. «Hay que seguir mejorando para que, cada vez que me necesite el mister, pueda jugar con orgullo en este club», apuntó el futbolista.
El propio portero señaló que el haber trabajado con la misma intensidad jugase o no la pasada temporada puede haber sido una de las razones por las que este año habría empezado él la competición como titular.
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«Tengo mucha ilusión puesta en que se dé un buen año y que el equipo siga haciendo bien las cosas. El cambio de portero el año pasado fue difícil pero al final Nereo hizo una gran campaña y yo me mantuve a un buen nivel entrenando. Es un gran portero y nos complementamos, yo espero poder seguir aportando y que el míster siga confiando en mí», apostilló el portero carbayón.
Esta es la cuarta temporada delcastellano-manchego en el conjunto azul, adonde llegó para jugar el primer año en el filial y luego subir al primer equipo. Tras estos tres años de experiencia en la capital asturiana, Alfonso está convencido de que se está cada vez más cerca del objetivo de devolver al club a la élite del fútbol.
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«Al igual que otros compañeros, ya vamos conociendo cada vez mejor la ciudad, la entidad y la afición. El club está dando pasos cortos pero eficientes y a nivel interno nosotros mismos notamos que cada vez se es más profesional si cabe», apuntó.
Ese crecimiento se ve reflejado también en lo deportivo, y aunque el equipo solo ha sumado uno de seis puntos posibles, Alfonso lo ve preparado para optar a todo. «Hay muy buena plantilla y los refuerzos han aportado mucho al grupo. Los objetivos te los irán marcando los resultados pero este equipo está preparado para hacer un muy buen año», concluyó el guardameta del conjunto carbayón.
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