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R. J. G.
OVIEDO.
Martes, 10 de diciembre 2019, 03:34
La plantilla azul regresó ayer por la tarde a los entrenamientos, tras dos días de descanso, y lo hizo con mucha presencia de público. Cerca de un centenar de aficionados, que aprovecharon el buen día para seguir el entrenamiento, hacerse fotografías con los jugadores ... y recabar autógrafos al final de la sesión.
Eso y las dos últimas victorias cambiaron sensiblemente el ambiente en la vuelta al trabajo, en la que hubo más sonrisas que otras semanas.
En entrenamiento participaron todos los componentes de la plantilla, salvo los lesionados Saúl Berjón y Joselu. El primero será baja hasta enero y el segundo tiene complicado estar en condiciones para el encuentro del próximo domingo ante el Cádiz. También se ejercitó el delantero del filial Samuel Obeng, que parece se ha hecho un hueco en la primera plantilla. No estuvo Riki, que el pasado fin se semana jugó con el filial ante el Celta B.
El trabajo se prolongó algo más de una hora y tras el calentamiento y la ejecución de varios ejercicios con balón y rondos, llegó el momento de más intensidad de la sesión con un ejercicio de posesión, con el equipo dividido en tres grupos.
La plantilla trabajará mañana por la mañana en El Requexón, a puerta abierta, mientras que el jueves está previsto que el entrenamiento se traslade al Tartiere, esta vez a puerta cerrada, al igual que las del viernes y sábado.
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