Paulino y Cazorla no pisan el césped y Borja Sánchez trabaja con normalidad

Atrás quedó el único día de descanso para la plantilla del Oviedo. Ayer los jugadores empezaron a poner el foco en el encuentro del domingo en tierras catalanas. Luis Carrión tiene las bajas seguras de Rodri Tarín, Mario Hernández y David Costas a los que casi con toda seguridad se unirá Paulino de la Fuente, que cayó en el partido del pasado domingo en el Tartiere y todos los indicios apuntan a una lesión muscular.

La gran incógnita es la que rodea a Santi Cazorla. El 'Mago' cayó lesionado ante el Andorra el pasado 26 de mayo. El domingo faltarán tres días para cumplir ese mes del que se siempre se habla en estas lesiones. Más importantes que los plazos serán sus sensaciones y éstas no son malas.

Como ya dejó claro el propio Cazorla: «Si hay 1% de posibilidades forzaré y no me importa lesionarme», así que ante el más mínimo resquicio de poder contribuir al ascenso del equipo estará sobre el césped los minutos que pueda.

En principio, la lógica invita a pensar que Cazorla volverá a ser citado con Carrión para que esté sentado en el banquillo como ya ocurrió en el partido del pasado domingo.

La baja de Paulino volverá abrir el debate de quién debe ser su sustituto. Dubasin fue el llamado por Carrión el pasado domingo, pero Masca y Borja Sánchez, que ayer completo el ensayo sin problemas, también reclaman su espacio en el once inicial.

Por delante restan tres entrenamientos más en los que Carrión deberá tomar las últimas decisiones de la temporada y de las que dependen un ascenso histórico a Primera División. Dado el buen rendimiento del equipo, no se prevén más cambios de los obligados.

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