Paco Jémez cree que la clave estará en «quitarles el balón y tener paciencia»

El Rayo Vallecano que esta tarde recibirá al Real Oviedo es uno de los conjuntos, inicialmente, llamado a estar en la zona alta de la clasificación, como correspondería al tercer tope salarial de la categoría, pero la realidad es que camina por la zona media de la tabla y con su entrenador, Paco Jémez, bastante cuestionado y en riesgo de ser destituido.

Además, en el mercado de invierno, ha perdido a su jugador más destacado: Embarba, fichado por el Espanyol. Para cubrir su baja ha hecho dos incorporaciones: el extremo Isi, de la Ponferradina, y el delantero Yacine Qasmi, del Elche.

El equipo madrileño, fiel al estilo de su entrenador, apuesta claramente por la valentía, por apretar al rival en su propio campo y por tener el balón el mayor tiempo posible en todos los partidos.

Jémez, que se sabe cuestionado por los resultados, se refirió ayer al conjunto azul, del que dijo que es «un conjunto que ha estado sufriendo por salir de los puestos de descenso». «Sale y se mete», añadió. También recordó que en el partido de la primera «nos ganó bien», por lo que, continuó, «no nos podemos fiar». «Si le dejas atacar, tiene gente para hacer daño», advirtió.

Sobre las claves del encuentro, el técnico del Rayo aseguró que «una parte del partido pasará por quitarles el balón y tener paciencia». En cuanto al juego de los ovetenses, Paco Jémez destacó que «ya no aprieta tan arriba, sino que te espera a tres cuartos», y, ante eso, entiende que «la mejor receta es la paciencia». «Tenemos que aprovechar nuestra capacidad para mover el balón para crear espacios», incidió el técnico.

En definitiva, Paco Jémez considera que esta tarde se enfrentarán a «un rival con herramientas de sobra para ganar a cualquiera». Ante eso confía en que puedan lograr una victoria para «seguir la buena racha de este año».

El técnico del conjunto madrileño es optimista sobre las opciones de los suyos de meterse en la zona de 'play off' y dejó claro que «nosotros nos preocupamos solo de nosotros». «No esperamos que los de arriba fallen. Todavía todos dependemos de nosotros mismos», afirmó y señaló que, para que los resultados de otros les puedan beneficiar, lo primero que tienen que hacer es «ganar». «Después de ganar, miro los resultados, pero, si no lo hacemos, el resto nos importan poco. Estamos pendientes de ir reduciendo distancias», dijo. Por último, señaló que ha pedido a los suyos un paso al frente: «Les dije a los jugadores que nos faltaba locura. Ni he cambiado, ni quiero, ni pienso cambiar. He modificado cosas que deben mejorarse».