El vestuario del Oviedo no perdió un segundo en lamentarse por el empate del choque de ayer y ya pone todo el foco en el duelo de vuelta del próximo miércoles. «El empate lo valoramos como algo positivo. La eliminatoria está abierta y vamos a ganar a Eibar», aseguró Leo Román, después de otra buena actuación en la portería azul. El meta reconoció la dificultad del choque y dejó clara la intención del grupo. «Ha sido un partido cerrado y se ha notado la tensión. Iremos con todo a por la victoria», aseguró.
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Al igual que el resto del oviedismo, Leo Román tiene claro lo que deben hacer. «Con el 0-0 solo nos vale la victoria, no hay más, así que iremos con toda la ilusión del mundo», afirmó. La cosa pudo cambiar con el remate de Paulino de la Fuente. «Fue buena, sí. Se elevó bien y fue una buena parada», analizó el guardameta. «No especularemos, pero creo que el Eibar hará lo mismo», argumentó sobre cuál será la actitud del equipo en Ipurúa.
Si hay unidad en algo es en lo arropado que se sintió el equipo ayer en todo momento. «Fue maravilloso, la gente nos ha llevado en volandas y el ambiente fue espectacular. Haremos todo lo que podamos en la vuelta por ellos», manifestó. El portero azul asume la responsabilidad que tiene el equipo en estos momentos. «Representamos a una ciudad y todos están volcados con nosotros, queremos darles esa alegría que merecen», dijo.
Santiago Colombatto, por su parte, arrancó su discurso tras el partido refiriéndose a la afición. «Esta gente está loca, es algo hermoso, fue un partido difícil y nos quedan 90 minutos para hacer historia y meternos en una final de 'play off' que estamos buscando desde hace mucho». El encuentro salió equilibrado porque «son un gran equipo, como nosotros, y no pudimos concretar las ocasiones, así que iremos a pelear a muerte», aseguró. El argentino sólo pidió a la gente que «crean hasta el final porque este grupo va a ir a pelear a muerte y lo haremos en Eibar para hacer historia».
Álex Millán es uno de los que más está disfrutando este momento. La grave lesión de rodilla que sufrió en pretemporada le robo protagonismo durante el curso y ahora cada minuto que tiene sobre el césped lo vive al máximo. El delantero aragonés quiso dar las gracias a la afición. «Han estado increíbles, nos han llevado en volandas desde el recibimiento, queríamos empezar ganando sobre todo aquí en el Tartiere y queríamos brindárselo», comentó. «Nos quedan 90 minutos en Eibar y vamos a ganar y todos los oviedistas estarán con nosotros», añadió. La afición sigue creyendo y estarán arropando a los suyos en Ipurúa.
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