Real Oviedo

Juanjo Nieto: «Mi primer año en el Real Oviedo ha sido un máster en todos los ámbitos»

Juanjo Nieto. Defensa del Real Oviedo ·

Tras un primer año como profesional «de mucho aprendizaje», el lateral tiene claro que volvería a fichar por el club azul «a ojos cerrados»

maría suárez

Domingo, 2 de agosto 2020, 01:45

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Juanjo Nieto (Castellón, 1994) aterrizó en Oviedo a principios de agosto, avalado por su gran campaña en el Hércules de Segunda B y por la apuesta personal de Michu, por aquél entonces secretario técnico del club. Llegar a un equipo con dos ... hombres más en su puesto no frenó su proyección y, casi un año después, hace balance en época estival de una temporada «insólita y difícil» pero muy buena en lo personal de la que sale como uno de los pilares defensivos y ofensivos del equipo. Con el reconocimiento de la afición en la mochila –jugador más valorado por ella de la temporada–, 25 partidos y 2 goles en su cuenta particular, analiza una campaña en la que ha sufrido su primera lesión importante. La misma que le acostó asumir pero que no le impidió volver justo a tiempo para sellar la permanencia en el lateral derecho.

–Primer año en el Oviedo y, aunque acaba con buen sabor de boca, ha sido el más duro de los últimos cinco años del club, ¿ha podido disfrutar pese a todo de esa temporada?

–He disfrutado mucho, incluso en los momentos difíciles. Este primer año en Oviedo lo recordaré toda mi vida, sin duda. Ha sido un máster en todos los ámbitos para mí. Desde el vestuario que me encontré hasta la ciudad, el cariño de la afición o el cuerpo técnico dejan en mí una huella imborrable. Absolutamente todo ha sido magnífico para mí en lo personal.

–En su caso suponía además el salto al fútbol profesional, ¿volvería a escoger Oviedo como plaza para esa transición si tuviera oportunidad?

–Con los ojos cerrados. Venir a este club fue la mejor decisión que pude tomar y lo volvería a hacer una y mil veces más si se diera la ocasión.

–¿Qué es lo más importante que le enseña a un futbolista afrontar la lucha por la permanencia y lograrla, cómo se ha logrado este año, en las últimas jornadas?

–Fundamentalmente que lo importante no es cómo empiezan las temporadas sino cómo se terminan. Que de todo se aprende, y que lo más importante es que uno se centre en disfrutar de cada minuto, sobre todo si se tiene la oportunidad de defender una camiseta como la del Real Oviedo.

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–En lo personal, ¿en qué ha cambiado el Juanjo Nieto que llegó a Oviedo buscando esa oportunidad del que se va ahora de vacaciones ya contrastado en la categoría?

–Llegó un Juanjo con muchas ganas de pelear un sueño, el de jugar en Primera División. Yeso no ha cambiado. El que se va de vacaciones lo hace cocn más ganas aún de alcanzarlo. Sería la bomba poder cumplir ese objetivo con el Oviedo y con esta afición detrás, porque es una institución de esa categoría y ahí es donde se merece estar.

–Y en lo deportivo, ¿qué sensaciones le deja este primer año en Segunda División? ¿Esperaba tener tanta presencia en ataque?

–Para mí ha sido un año bueno en todos los aspectos, el aprendizaje que he tenido en mi primer año de fútbol profesional ha sido brutal. Soy un jugador ofensivo, además es que me gusta atacar y disfruto enormemente pudiendo hacerlo durante los partidos.

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–Tres entrenadores, cambio en la dirección deportiva, lucha por la permanencia y una pandemia a nivel mundial, seguramente no haya sido la temporada que esperaba en su debut, ¿qué balance ahora que el Oviedo puede darla por terminada?

–El balance es bueno. Está claro que a principio de temporada luchar por seguir en Segunda no era el objetivo, pero tras vernos en una situación tan adversa y tan difícil, el equipo ha luchado ha peleado y ha acabado consiguiendo salvar la categoría. Ha sido una temporada diferente a la que esperaba, pero ahora que termina y lo hace bien lo que debemos hacer es aprender de estos percances y empezar a pensar en la próxima con la mayor ambición del mundo.

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–Llegó a un equipo con dos hombres más para el lateral derecho, y eso no fue impedimento para acabar cerrando la operación...

–Cuando estás en Segunda B y un club como el Real Oviedo te da la oportunidad de formar parte de su historia lo que se ante ti es unaoportunidad brutal, algo que no pasa todos los días ni mucho menos. Lo único que sentía eran ganas y más ganas de poder ponerme la camiseta de este equipo y hacerlo por primera vez en el Tartiere.

–¿Qué papel jugó Michu a la hora de convencerle para hacer las maletas?

–Michu jugó un papel fundamental en mi llegada. Él fue la personal que realmente apostó por mí y siempre le estaré agradecido por ello. Además me transmitió la confianza y la tranquilidad necesarias pese a que todo iba muy lento y que llegué tarde.

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–Le costó entrar en el once, pero tras el paso de las jornadas se ha contrastado como la primera opción para el puesto...

–Soy consciente de que empecé la temporada con altibajos, pero sabía también que el recorrido era muy largo y que sería cuestión de tiempo tener mi primera oportunidad para ganarme esa continuidad. He trabajado mucho, muchísimo y he competido conmigo mismo para mejorar cada día y llegar al nivel que requieren tanto el club como la categoría.

–La rotura de fibras le llegó cuando había alcanzado esa continuidad, ¿en qué momento empezó a temer que las molestias fueran más que una mera sobrecarga?

–Tenía molestias en esa mini pretemporada que afrontamos tras el confinamiento, pero no quise parar en ningún momento, ni siquiera cuando me dijeron que estaba roto. Al final decidimos parar porque nadie quería que mi situación empeorara.

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–¿Qué supuso confirmar la noticia justo cuando se retomaba la competición?

–Esta ha sido la primera lesión que tengo en mi carrera deportiva, y por esa razón me costó un montón asimilar la situación. Ni siquiera quería parar de entrenar aún confirmada la rotura, pero acabé entendiendo que lo mejor era parar.

–¿Como fue su trabajo en El Requexón a partir de entonces, de nuevo al margen del equipo?

–A partir de ese momento me puse manos a la obra y trabajé mañana y tarde para poder recortar las seis semanas que me dijeron que necesitaría para recuperarme de la lesión. Al final logré ganarle dos semanas a la rotura y eso fue lo que me permitió jugar los dos últimos partidos.

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–Ziganda destacó el nivel y el rendimiento con el que regresó tras casi cuatro meses sin competir, ¿esperaba volver en ese estado de forma?

–Yo tenía claro que estaba para jugar. No tenía ningún miedo porque me sentía recuperado al cien por cien y con más ganas que nunca de volver a competir. Si sumas todo eso a la confianza que me dio el míster, es imposible no rendir en el terreno de juego.

–¿Qué cree que fue clave para recuperarse de ese modo, en tan poco tiempo y sin recaídas?

–Las ganas que tenía de volver para poder ayudar a mis compañeros. Me obsesioné con acortar plazos porque tenía claro que, si no lo lograba, no iba a poder llegar con margen para jugar algún partido. El readaptador, Michi, trabajó conmigo a doble turno, cuidé más que nunca la alimentación y asumí el regreso liberándome del miedo a recaer de la lesión.

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–Es complicado aventurar algo de la próxima temporada viendo lo impredecible que ha sido el final de esta, pero, ¿qué le pediría a la campaña que viene?

–En lo deportivo, poder seguir recorriendo la banda del Carlos Tartiere, y que pudiera ser con el campo lleno. Quiero seguir sintiendo ese cariño de toda la afición, porque me da unas alas muy especiales.Me encantaría seguir aprendiendo como lo he hecho esta temporada, y asentarme en la ciudad, luchando aquí, con esta camiseta, por jugar algún día en la máxima categoría del fútbol español. En lo personal, dadas las circunstancias, lo único que pido es que la situación sanitaria en la que nos encontramos se acabe y que todo el mundo pueda salvaguardar su estado de salud.

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