«Estoy bien y con fuerzas, el día que no me vea capaz de solventar esto lo diré»

«Estoy con fuerzas, sé la situación en la que cogí al equipo y que no iba a ser fácil. Por mi parte no va a decaer, el día que vea que no soy capaz de solventarlo lo diré, pero el equipo está entrenando bien y con confianza», comentó el ovetense.

Rozada afirmó que es consciente del club que entrena y relativizó la mala racha de resultados del equipo señalando que no le preocupa haber ganado solo dos de los últimos diez partidos porque el equipo mereció más en este último tramo de competición.

«No me parece un dato preocupante, este equipo pudo ganar 5 o 6 partidos perfectamente. Ya avisé de que era una pena cómo influían en los resultados los factores externos –decisiones arbitrales–, porque son los que nos han hecho jugar todo finales, y eso desgasta, por eso ha ocurrido lo de hoy (por ayer)», comentó el ovetense, en referencia a lo ocurrido en la derrota ante el Alcorcón.

Lo que sí preocupó al entrenador carbayón fue la imagen de los suyos en una primera mitad en la que estuvieron completamente sometidos por el rival. El propio Rozada reconoció estar «sorprendido» por esa imagen del equipo en el Carlos Tartiere, más aún teniendo en cuenta lo que se jugaba el club en ese partido.

«Me sorprende esa primera parte, pero esto es fútbol. Ante Girona, Albacete y Rayo dimos la imagen contraria, pero hoy (por ayer) nos confundimos. No tuvimos la intensidad, el compromiso y la concentración que siempre digo que hay que tener. Quedan 14 partidos y espero queno vuelva pasar, pero sí, me sorprende porque el equipo estaba responsabilizado y sabía lo que había en juego», comentó.

Rozada recordó que de haber ganado se hubiera dando un golpe en la mesa importante para salir de la parte baja de la tabla, y admitió que «tener solo 29 puntos a estas alturas de Liga es duro». Al equipo no le fue suficiente el arreón de la segunda mitad para lograr el empate y la derrota evita que los azules puedan meter a más equipos en la lucha por la permanencia, lo que supone una oportunidad perdida.

«Es una pena porque ganar nos hacía ver un horizonte nuevo, involucrar a equipos que están incluso décimos. La línea es buena, acabamos bien el partido, pero necesitamos sumar. Hicimos una primera mitad muy mala, sin ganar ni una sola jugada, y es algo que no podemos permitirnos porque luego fuimos a remolque y así es difícil puntuar», analizó el entrenador.

Rozada normalizó del equipo tras verse dos abajo en el marcador antes del descanso, y explicó que es natural debido a la situación del vestuario. «Es normal estar inseguro cuando pierdes en casa y ante el Alcorcón, por la situación en la que estamos. Me preocupa más el hecho de que se adelanten y por qué. Pudimos hacerlo nosotros con el gol de Ibra pero lo hicieron ellos doblando pases con mucha facilidad en un mal repliegue nuestro. Defendimos con poca intensidad y nos vimos por debajo. El equipo es humano, no enlazó jugadas y eso es lo que al final te da confianza», concluyó el entrenador azul, que vio en ese inicio malo de los suyos la razón por la que no logró el empate al final.