Real Oviedo | «Estamos convencidos de que esto se va a sacar adelante con la unión de todos»

El defensa Christian Fernández es uno de los capitanes del Real Oviedo. El domingo tiró de galones en el Anxo Carro, parándose con los aficionados, y ayer también en la sala de prensa lo hizo en la sala de prensa. El cántabro aseguró que los jugadores están «convencidos de que esto se va a sacar adelante, me niego a admitir el destino que se nos atribuye, pues desde muchos ámbitos nos dan como un equipo de Segunda B».

También apeló a una frase habitual del extécnico Juan Antonio Anquela y prometió que lo van a intentar «hasta el último minuto del último partido». El defensa azul no quiso entrar a valorar el nuevo cambio de técnico y se limitó a decir que eso siempre es «consecuencia de que los resultados no llegan, las decisiones las toma el club y como jugadores tenemos que asumirlo».

Antes de valorar el tercer cambio en el banquillo, lo que cree que deben hacer es «cada uno tiene asumir su responsabilidad para analizarse y ver lo que puede hacer mejor, no hay otro camino, no puedo mandar otro mensaje». También apeló al trabajo y dijo que es a lo único que «nos podemos agarrar ahora» y, sobre todo «estar todos unidos, club, equipo y afición».

En este sentido dejó claro que «habrá tiempo cuando termine la liga de analizar y buscar culpables» y que ahora lo que pide es «la unión, que existe, y va a posibilitar pelear por el objetivo que es la salvación».

El defensa explicó que el domingo fue de los que habló con la afición por su condición de capitán «es momento de dar la cara, para eso estás, no solo para llevar un brazalete». Además, aunque el no fuera centro de las críticas explicó que «esto no va de salvar los muebles individualmente, aquí culpables somos todos» y añadió que es consciente de que otros compañeros están «sufriendo esa ira o ese malestar de la afición. No soy ajeno a ello y me siento igual de responsable y dolido, ya que sufro por ello».

Del mismo modo, cree Christian Fernández que la situación la «va a sacar el equipo, no una persona en concreto». Aunque asegura que entiende el enfado de los aficionados, considera que «esas cosas no suman, aunque sea difícil hacérselo ver» y reconoce los esfuerzos de los oviedistas para ayudarles, pero entiende clave «que también comprendan que desde la ira, el insulto o la poca comprensión, no se suma». Para él, en una situación que no es agradable «estamos implicados todos, cada uno desde su parte. La directiva, los jugadores y la afición, que es la que lo sufre».

Por ello insiste en que es momento de «estar unidos y luchar, para que el Oviedo siga en Segunda, hay que estar todos juntos». Luego llegará el momento del análisis y los reproches «cuando acabe la temporada, ya analizaremos esta situación. Allí, que la gente se explaye a su gusto y encuentren culpables, cabezas o lo que sea falta» y reitera que «ahora es momento de estar unidos y pensar en ganar al Tenerife».

En cuanto al futuro entiende que no es momento de pensar más allá del domingo «debemos focalizar esta semana. Que cada uno ofrezca su mejor versión entrenando, si hay que cuidarse más, hay que cuidarse más». Entiende que los futbolistas deben tratar de llegar al partido en las mejores condiciones para «sacar tres puntos» y después «ya pensaremos en el Extremadura», dijo.