El colista alivia al Real Oviedo

La victoria fue cómoda y estropeada en el descuento por un error de Femenías y permite al equipo de Ziganda asomarse a los primeros puestos y pensar en acabar la primera vuelta cercada de ellos.

La alineación de los oviedistas fue la prevista, sin que repitiera ninguno de los que jugaron en Copa del Rey y con tres novedades en relación con el último encuentro de liga, ante el Mirandés, con la entrada en el equipo titular de Pierre, Borja Sánchez y Obeng.

Los ovetenses salieron dispuestos a tomar el mando del partido y tenían el balón en su campo tratando de madurar el partido y percutir en la portería visitante. Las ocasiones empezaban a aparecer, pero el portero visitante, Dani Jiménez, estuvo especialmente acertado en sus primeras intervenciones.

Los ovetenses tenían el balón en su campo hasta que aparecía la velocidad de Viti, por la derecha, o la calidad de Borja Sánchez por la izquierda. Jimmy y Brugman, sobre todo el segundo buscaban filtrar algún pase a Borja Bastón u Obeng, pero no acaban de encontrarlos.

Las primeras ocasiones comenzaban a llegar, pero al equipo carbayón le faltaba algo de convicción para aprovechar la superioridad que estaba mostrando. Los errores en el último pase y en el remate mantenían con vida a los madrileños, que apenas pasaban del centro del campo.

La ocasión más clara de los ovetenses llegó en una buena combinación por la frontal, en la que Brugman encontró a Borja Sánchez al borde del área pequeña, pero sus dos reates fueron repelidos por Dani Jiménez.

El partido, disputado bajo una intensa lluvia, carecía de ritmo, ya que los ovetenses se conformaban con tener el balón y los visitantes con mantener su portería a cero, a la espera de un contraataque o una jugada aislada que les permitiera sorprender a los locales. El campo tampoco permitía demasiadas florituras y beneficiaba cada vez más a los de Fran Fernández, que estaban cada vez más más ocupados en defender.

Al final la primera mitad acabó como empezó, pese a que los ovetenses tuvieron ocasiones para adelantarse, ya que sin un juego brillante tuvieron tres ocasiones para adelantarse en el marcador. Tuvieron más posesión, pero pareció faltar algo de confianza y ambición para ir a por el partido aprovechando el conformismo del rival.

La segunda mitad no pudo empezar mejor para los de Ziganda, ya que en la segunda jugada Viti robó un balón en el centro del campo e inició un contraataque en el que encontró el desmarque de Borja Sánchez. El ovetense haciendo gala de su eficiencia como asistente puso el balón al área donde Brugman, como si de un delantero se tratara cabeceó ajustado el balón al palo para adelantar a los azules en el marcador y poner el partido de cara, después de hacer lo más difícil que era abrir el marcador y obligar al Alcorcón a dar un paso al frente.

Los ovetenses pudieron aprovechar el desconcierto que causó en los madrileños el gol, ya que poco después del tanto de Brugman tuvieron una clara ocasión, un nuevo robo de balón acabó con un disparo desde la frontal de Jimmy que se estrelló en el poste de la portería de Dani Jiménez.

El equipo de Ziganda estaba más metido en el partido y tenía una de sus principales bazas en la facilidad con la que robaba balones en el centro del campo y lo difícil que ponían a los alfareros salir de su campo con el balón controlado.

Los carbayones, animados por la ventaja en el marcador dieron el paso al frente definitivo y fueron capaces de sentenciar el encuentro en apenas dos minutos. Brugman, que cada día está ganando peso en el equipo y siendo clave, recibió en la frontal y buscó a Borja Bastón, que, de espaldas a la portería tocó de cabeza lo justo para batir a Dani Jiménez.

Solo tres minutos después llegó la puntilla al partido. En esta ocasión fue Obeng el que entró por la banda derecha y puso un balón al centro, donde llegó Borja Bastón para rematar ajustado al poste y marcar el tercer tanto de la tarde.

Una vez hecho el trabajo, los de Ziganda se conformaron con dejar pasar los minutos y tratar que el Alcorcón no se acercara a Femenías, lo que lograron, también ayudados por la inocencia de los visitantes. Solo en el tiempo añadido, en un error del meta balear que no estuvo contundente en la salida, llegó el tanto del honor de los visitantes, que les permitió decorar la derrota.