Chicho Villanueva cuelga las botas

El mierense será segundo de Manolo Simón en el Caudal Deportivo, por lo que no desvincula del fútbol aunque sí deja de hacerlo vestido de corto. Precisamente en el Caudal empezó una carrera que le hizo pasar por equipos tan variopintos como el Noja, el Zamora, el Marino de Luanco o el Vecindario.

El extremo debutó en Segunda División con 27 años y lo hizo defendiendo la camiseta del Eibar, aunque sería en el Vecindario, cuatro años más tarde, donde disfrutaría más de la categoría. Tras jugar once partidos en el conjunto insular y dejar el equipo en el mercado invernal, 'Chicho' apostó fuerte por un Real Oviedo que entonces militaba en Segunda B y apuraba sus opciones de permanencia. La temporada, dirigida desde el banquillo por el Lobo Carrasco, acabó con un dramático descenso a Tercera que no acabó con el periplo azul de Villanueva.

El futbolista vivió en primera persona el desastre en el intento de ascenso frente al Caravaca y presistió en su empeño en la siguiente campaña. Tras lograr la vuelta a Segunda B, cerró una etapa de tres temporadas como futbolista carbayón.

En el mercado invernal de la temporada 2009-2010 salió cedido al Marino de Luanco, donde jugó hasta en tres fases diferentes de su carrera.

Sus dos últimas temporadas en la categoría de bronce fueron en las filas del Lealtad, entre 2014 y 2016. En esa etapa, en la que alcanzó los 40 años, disputó un total de 52 partidos a las órdenes del actual entrenador del Vetusta, Javi Rozada. Precisamente junto al técnico carbayón se rumoreó que podría ir ligado su futuro como entrenador, pero finalmente este va unido al de Manolo Simón y un año más tarde de lo comentado entonces.

Más de una decena de equipos han disfrutado del juego de Chicho Villanueva en casi un cuarto de siglo como futbolista. Todo ese bagaje lo vivirán en primera persona ahora los futbolistas a los que entrene uno de los jugadores que vivió los peores años de Real Oviedo: el infierno de la Tercera.