«Tenemos que buscar la salvación cuanto antes y luego ya se irá viendo»

Aunque marcó el mes de abril como plazo para saber el objetivo del conjunto azul, el navarro dijo que a lo que aspira es a «buscar los 50 puntos cuanto antes o a acercarnos a ellos» e insistió en que «luego ya se irá viendo».

En la última fase de la competición, el Oviedo está careciendo de creación de juego ofensivo, algo que no ocultó el entrenador. «Últimamente no estamos creando tantas ocasiones como en la primera vuelta», explicó y apuntó, entre las causas, a que «los rivales también juegan, nos van conociendo cada vez mejor y la finura de los futbolistas no está siempre en su máxima expresión». En cualquier caso, Ziganda señaló que «de una manera o de otra seguimos haciendo goles, porque, por ejemplo, ahora estamos más acertados en la estrategia». Lo que sí reconoció es que los problemas están, sobre todo cuando juegan como locales, «en el juego combinativo». «Sobre todo en casa, nos está faltando capacidad para desmontar esos sistemas defensivos».

Lo que no echa en falta es un futbolista que lleve el peso goleador -«la fase ofensiva no depende solo de un jugador»-, señaló que «hay alguno que está marcando diferencias, como Djuka, Sadiq o Raúl de Tomás, pero son dos o tres, no hay muchos más», e insistió en que «lo normal es tener, como nosotros, jugadores que aporten cosas, pero no estamos viendo a gente que pase de diez goles con facilidad en Segunda».

Además, Ziganda no cree que se trate solo de un problema de su equipo. «No es una excusa, pero, si ves los partidos del fin de semana, los conjuntos estamos amarrando mucho y pensando en no equivocarnos», dijo.

El equipo azul afronta ahora dos partidos consecutivos como visitante y ante rivales de la zona baja, Alcorcón y Castellón. Ziganda pronostica que «serán encuentros muy duros» y, en el caso de los alfareros, destacó «qué entrenador tiene el Alcorcón, cómo enchufa al equipo». A su juicio, el partido de hoy tiene una dificultad añadida por la forma de jugar de los de Anquela: «El último equipo que nos jugó con tres centrales y carrileros fue el Leganés y tuvimos nuestras dificultades. No tendrá nada que ver por el campo y el rival. Será el mismo sistema, pero las condiciones serán diferentes».

Lo que sí confirmó el entrenador azul es que habrá cambios en el once. «Va a haber rotaciones. No es porque no puedan jugar dos partidos en tres días, pero después jugamos otra vez en Castellón», explicó y recordó que «tenemos a la plantilla disponible». «No quiero regalar nada, pero sí es un buen momento para los jugadores que se lo ganan entrenando y me transmiten confianza», destacó.

Por último, reconoció que echa de menos a la afición en partidos como el del sábado: «Nos faltó ese 'punch' en el área y con la afición me lo estoy imaginando, con la grada empujando».