Borja Bastón relanza al Oviedo

Lo intentaba Lucas por la derecha, pero la banda estaba atascada. Con Brugman entrando poco en juego la solución para llegar al área contraria era que el balón le llegara a Borja Sánchez. suya fue la primera jugada de peligro, con un centro al que no llegaron por poco ni Obeng, ni Borja Bastón.

Los de Ziganda tenían el balón y, salvo un disparo lejano de Omeruo, los madrileños apenas eran capaces de pasar del centro del campo. A medida que Brugman fue apareciendo y Viti empezó a desbordar en velocidad, no solo por la derecha, sino también por el centro, el equipo daba más sensación de peligro.

Sin embargo, también comenzaron a aparecer algunos errores en el centro del campo, con alguna pérdida de balón que pudo costar un disgusto y, además, minó la confianza del equipo que comenzó a ceder algo de terreno y pasar por los primero minutos de apuros, aunque sin oportunidades claras.

El Leganés estaba creciendo y en el tramo final de la primera mitad tenía sometido al conjunto ovetense que no era capaz de hacerse con el balón y por eso tenía que correr detrás de un rival que cada vez tenía más claro la forma de hacer daño.

Especialmente desafortunado estaba Luismi, que erró numerosos pases y también dio algún balón a los contrarios que pudieron costar un disgusto más que serio.

Pese a todo, en la última jugada peligrosa de la primera mitad el conjunto ovetense dispuso de una buena ocasión. Una arrancada de Viti por la derecha, en la que ganó la línea de fondo, la acabó con un centro, que llegó a Brugman en la frontal, pero su disparo se estrelló en el cuerpo de un defensa.

El marcador no se movió en una primera mitad en la que los locales fueron de más a menos y en la que ninguno de los dos equipos tuvo ocasiones claras.

La segunda mitad se inició con los mismos protagonistas, por parte de los locales, mientras que en los visitantes entró el exoviedista Bárcenas. Volvieron a parecer salir mejor los de Ziganda, pero el partido tampoco tenía mucho control por ninguno de los dos contendientes. Hasta que Lucas, que lo había intentando muchas veces sin éxito, mandó un balón al área y Borja Bastón se adelantó a todos los rivales para cabecear ajustado al poste y hacer inútil la estirada de Dani Jiménez.

El nuevo escenario de partido que se abría era realmente prometedor para los ovetenses que podían tener algún espacio más y también esperar a que fuera el Leganés el que tomara la iniciativa y también los consiguientes riesgos. Sin embargo, lo primero que ocurrió fue una mala noticia, un mal pase de Lucas obligó a David Costas a derribar a Bárcenas y le costó la tarjeta que le hará perderse el derbi, al igual que Montiel que también fue amonestado.

Ziganda retiró del campo a Obeng y sacó a Javi Mier con el objetivo de tener algo más de control del juego y cierta frescura para los contraataques. El Leganés empujaba cada vez más y Bautista estuvo a punto de sorprender a Femenías, que tuvo reflejos para despejar su disparo.

El final del encuentro fue de una auténtica agonía para los azules, ya que aunque sin crear ocasiones claras el Leganés, el acoso era incesante, otra vez favorecido por errores en el centro del campo y pérdidas de balón.