Los arbitrajes traen de cabeza al Real Oviedo

El Real Oviedo salió muy descontento con el arbitraje del pasado sábado en el Carlos Tartiere. Las acciones que generaron malestar en el bando oviedista tuvieron el mismo protagonista: el defensa Oier Luengo. En cualquier caso, desde el club, se ha optado por no hacer declaraciones, ni posicionarse al respecto. No obstante, en los próximos días se decidirá si se transmite algún tipo de queja a la Federación Española y al Comité Técnico de Árbitros.

El valenciano Andrés Fuentes Molina dejó descontento al equipo carbayón y a sus aficionados por dos decisiones, en las que tampoco quiso entrar el VAR, en el que estaba el vasco Gorka Saguez Oscoz.

La primera acción en la que el conjunto ovetense se siente perjudicado llegó cumplida la media hora de partido, en un saque de esquina botado por Santi Cazorla. El defensa Oier Luengo entró al remate en el segundo palo, pero no pudo encontrar el balón, ya que acabó rodando por los suelos ante lo que pareció un claro agarrón de Aldasoro.

Los dos jugadores forcejeraron antes del saque, pero con el balón ya en el aire las imágenes dejan bastante claro que el futbolista del equipo cántabro agarra con suficiente fuerza al defensa para que acabe rodando por los suelos.

La segunda decisión polémica llegó a la hora de partido. Nuevamente Oier Luengo estuvo en el foco, una entrada sobre Arana en el centro del campo le valió la tarjeta roja por parte de Fuentes Molina. En el acta, el colegiado indicaba que la expulsión fue «por hacer una entrada por detrás, haciendo uso de fuerza excesiva en la disputa del balón».

Pocos minutos después, el árbitro expulsó al exoviedista Sangalli por una entrada similar en el centro del campo sobre Sebas Moyano.

Al término del encuentro, contra lo que suele ser habitual, los entrenadores de los dos equipos coincidieron en sala de prensa sobre la valoración de las dos expulsiones.

El técnico del Racing, José Alberto López, fue el primero en pronunciarse y dijo que tras ver las dos acciones por la tele le parecieron «muy rigurosas ambas». Por su parte, Luis Carrión se manifestó en la misma línea y dijo que «para mí no son ninguna de las dos». El técnico catalán añadió que «las expulsiones así merman el espectáculo».

Los jugadores azules también reclamaron, en el primer tiempo, un penalti por una mano de Manu Hernando, tras un disparo de Bretones.