La APARO organiza un recibimiento al equipo en la rampa del Carlos Tartiere

La ciudad se engalana para esa última final que va a jugar su equipo y, aunque el Oviedo no llega a ella dependiendo de sí mismo, sí afronta la última jornada de liga con toda su afición arropando a los azules. Pancartas en los balcones, porque «sí se puede», y arengas a todos los que forman parte de ese vestuario, inundan calles y redes sociales, como si el golpe de caer en Las Palmas no hubiese afectado a la fe más oviedista. La misma que salvó a un equipo que todo el mundo daba por deshauciado, la misma que sigue creyendo que se volverá a Primera y que, especialmente este, puede ser el año.

La Asociación de Peñas Azules (APARO) ha respondido a la importancia de esta cita organizando un recibimiento a la plantilla y al cuerpo técnico antes de ese cruce trascendental ante el Ibiza. La convocatoria, prevista para el domingo a las 18 horas, congregará a la afición azul en la rampa para vivir «un recibimiento como los de antes». «Es el día más importante de los últimos años y donde de verdad debemos demostrar nuestro oviedismo, incluso antes del partido», reza la misiva lanzada en redes.

Bajo el lema «¡Todos a la rampa!», se arenga a una afición que no ha dudado en lanzarse también a las taquillas para aprovechar la campaña de acompañante del club. El primer día se superaron las 1.600 localidades vendidas, y ayer, aunque no se registraron datos oficiales, las colas fueron un hecho a última hora de la jornada en las tiendas del club en Los Prados y en Caveda. El oviedismo no fallará a la cita.