Marcos Torres con el portavoz del Real Avilés, Daniel Codina, ayer en el Suárez Puerta.
REAL AVILÉS

«El objetivo del Real Avilés tiene que ser ascender y quiero ayudar»

Marcos Torres llega para reforzar las bandas del equipo blanquiazul y se muestra ambicioso con un proyecto que califica como «muy ilusionante»

Nacho Gutiérrez

Martes, 18 de agosto 2015, 01:54

«El objetivo del Real Avilés tiene que ser el ascenso y quiero ayudar a conseguirlo, por eso he firmado por un club histórico y que está preparando un muy buen proyecto al que llego muy ilusionado y dispuesto a dar lo mejor por mi nuevo equipo». Así se expresaba en su presentación oficial el hasta ahora último fichaje confirmado por la dirección deportiva del conjunto realavilesino, Marcos Torres Antañón, un gallego de Vigo formado en la cantera del Celta y que reforzará la bandas del equipo de Pablo Lago.

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Su juventud, 22 años, y una experiencia de tres campañas en Segunda B, con el filial celeste y con La Hoya Lorca, del que procede, han inclinado al Real Avilés por su contratación en una apuesta del director deportivo Juanjo Prendes y avalada por el propio entrenador, que ya ha podido dirigir un par de sesiones con el vigués en el grupo de 16 jugadores que tienen ficha con el primer equipo.

«Nos va a dar un plus», afirmó el portavoz del Avilés, Daniel Codina, quien destacó las virtudes del nuevo jugador blanquiazul, que estaba sin equipo a la espera de una oferta que, finalmente, le trae a un equipo de Tercera, lo que puede entenderse como un paso atrás: «A primera vista puede ser, pero vengo al Avilés para dar después un paso adelante porque es un club con nombre y el equipo que está haciendo me parece de lo mejor». El domingo pudo verlo ante el Marino: «Creo que se hizo un buen partido, pero el gol del empate nos hizo daño porque ellos se ordenaron muy bien y a nosotros nos pasó factura el esfuerzo». Destaca que «para llevar solo un mes y con todos los futbolistas nuevos, el equipo demostró que es competitivo, compacto y que podemos aspirar a todo sin olvidar ir partido a partido».

Marcos Torres tiene un amigo en la plantilla, Luismi, del que habla maravillas y que fue quien le dio los mejores informes del Avilés para inclinar su decisión de firmar, en su caso por un año. Llega como su compañero de la mano de David Tamargo, hijo del representante José Luis, quien ayer se acercó al estadio para arropar al futbolista en su presentación. Se define como «jugador de banda que puede adaptarse al medio por delante de los pivotes y también al lateral derecho».

Tras un verano en el que «he trabajado algo por mi cuenta», Marcos tendrá que hacer una especie de pretemporada para «ponerme a tono en el aspecto físico», sin ponerse fecha para estar disponible aunque «el entrenador puede contar conmigo en cuanto vea que estoy a la altura de mis compañeros».

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