«Estévez nos ha faltado al respeto»

Lo primero que hizo Josu Uribe en rueda de prensa fue contestar a Fernando Estévez, que describió el planteamiento del Real Avilés como «pobre y rudimentario», y aseguró que el Guijuelo había «pasado por encima» del Avilés, «como una apisonadora».

El gijonés, que ya fue protagonista de una situación parecida con Fredi Álvarez, actual técnico del Celta B que la pasada temporada estaba en las filas del Compostela, tildó las palabras de Estévez de «falta de respeto y mal compañero». Uribe opina que «cada uno es libre de jugar y de vivir como quiera, y nadie tiene la posesión de la verdad, como parecen creer este tipo de entrenadores 'valdanistas'. Si llegamos a meter la de Matas igual no venía diciendo estas tonterías», explicaba, aludido.

Uribe continuó su discurso preguntándose cuántas Champions había ganado Fernando Estévez, y recordando que «cuando yo estuve en el fútbol profesional siempre fui muy respetuoso con los planteamientos de todo el mundo. Me fijaba mucho en lo que hacían y, me gustase o no, lo respetaba. Pero este tipo de entrenadores piensan que sólo se puede jugar como a ellos les gusta, y otros vemos el fútbol de otra manera. A mí, por ejemplo, me gusta más el robo y la velocidad arriba».

Para el técnico gijonés el empate fue un resultado justo y lo valoró «positivamente», si bien reconoció que «pudimos cerrar el partido en la primera mitad. Con 1-0, estábamos presionando bien arriba, dificultando mucho el juego del Guijuelo y creo que ahí pudo estar el partido para nosotros. No marcamos y en la segunda parte ya estuvieron más cómodos».

En ese sentido, «el Guijuelo es un equipo que tiene buenos futbolistas, que maneja bien el balón y nosotros ya estábamos muy cansados. Tuvimos que jugar con Pascual, al que agradezco el esfuerzo de haber jugado porque estaba al 50%, y ya nos costó mucho más seguir el ritmo de la presión. Aun así, ellos tampoco gozaron de muchas ocasiones claras, un par, y nosotros tuvimos una en las botas de Matas que nos pudo dar el partido. Seguimos sumando y es un punto que nos da tranquilidad».

El entrenador del Real Avilés se mostró contento con la actuación de los jugadores del filial, Guille Méndez y Borja Granda, y para explicar la titularidad de éste último en detrimento de Marcos Cerrudo aseveró que «soy de la opinión de que los que vengan de fuera tienen que ser mejores que los de casa. Y si no los superan o los igualan, jugarán los de casa».