Al Avilés le sale cruz en Mieres (1-0)

Un resultado que frena la progresión avilesina con el pago de un puesto al pasar por delante el Caudal con dos puntos de renta y el coeficiente particular con sus dos triunfos, ambos por la mínima y a balón parado: aquí con un penalti, allí en un desgraciado córner, por cierto el único del Caudal en todo el partido.

Una cita muy esperada y que tras ser aplazada de la decimoquinta jornada elevaba, si cabe, el valor de los puntos por lo poco que queda de calendario, para el Avilés solo tres encuentros ante Lenense, Praviano y Ceares. Con la derrota de ayer el margen de error es cero. O casi.

Quizás por esa trascendencia los dos equipos se tuvieron mucho respeto, no equivalente a falta de ganas por la victoria. Ambos se repartieron los momentos de dominio, el Avilés mejor en la apertura de los dos tiempos, el Caudal en los tramos siguientes.

Chuchi Collado, sancionado y en la grada en contacto con Chicho Villanueva, su ayudante, repitió el once de Tabiella mientras Luis Rueda daba entrada a Oliveira y Guille Vázquez por Benéitez y Silveira. El técnico buscó la sorpresa con Mabwati como punta junto a Natalio, dejando el carril derecho para el citado Guille.

La puesta en escena del Avilés pilló a contrapié al Caudal y durante un cuarto de hora largo se jugada en campo mierense, con dominio de la zona ancha y Joao percutiendo por el carril izquierdo haciendo varios descosidos en la zaga local. El brasileño causaba estragos y a los doce minutos tuvo la ocasión de adelantar a los suyos y marcar por tercera jornada seguida. Trazó una pared con Natalio y escorado por la derecha elevó con su pierna mala ante Javi Porrón, que sacó una mano de primera categoría para salvar la contingencia.

El Caudal estaba desbordado pero empezó a reactivarse y las fuerzas se igualaron, con muchas disputas y balones imprecisos de una y otra parte. Los mierenses se animaron a partir del minuto 27 tras su primer asomo al área de Davo, por cuenta de Caique en un disparo que se fue por la línea de fondo. El Avilés ya no tenía el mando, pero buscó su suerte y la pudo lograr en una asociación de Guille y Natalio resuelta a duras penas por la defensa, y un disparo blando del propio Guille. Oliveira, a balón parado, dispuso de un cabezazo que se le fue por la línea de fondo.

En el descanso Rueda dio entrada a Rafa Silveira por Guille y de nuevo el arranque del Avilés fue mejor que el caudalista, aunque sin frutos porque las defensas seguían imperando. Hasta la jugada que rompió el partido a los 58 minutos en el que fue primer y único córner local. Caique la puso, el balón llegó al corazón del área y tocó en Joao para colarse en la red.

Napoleone y Benéitez entraron en escena y el Avilés se volcó generando llegadas sin poder concretar, con un remate del excaudalista que se fue desviado en el minuto 78. Silveira tuvo la cuya en una falta y Mabwati buscó varis veces la jugada buena sin suerte. El Caudal, agazapado en su campo, pudo hacer el segundo en un pase de Cristian a Damián, cuyo derechazo solo ante Davo fue repelido de manera prodigiosa por el portero.