La afición responde en otra fecha histórica

Si se diese una vuelta al calendario, nadie creería que hace tan solo un año el Real Avilés estaba jugando por objetivos radicalmente distintos ante el Gernika en la ida del 'play off' de ascenso a Primera RFEF. Pero a tenor del ambiente de ayer en la ciudad y en el estadio, el apoyo de la afición blanquiazul a sus jugadores parecía el mismo. Nada que ver con la gélida mañana de hace quince días ante el Ourense. Ayer el Avilés se jugaba mucho, y la afición lo entendió desde el principio de la semana.

La Fan Zone fue la 'zona cero' de la fiesta en los prolegómenos del partido. La curva del fondo de La Exposición lució más blanquiazul que nunca, con presencia de ilustres exjugadores que no quisieron perder la ocasión de animar al Avilés. Uno de ellos era Blas García, ahora entrenador, que compartía unos minutos con otra leyenda y actual delegado, Joaquín. «Si jugase Joaquín, estaba garantizado», bromeó Blas. Ya más en serio, hacía su análisis de lo que debía hacer el Avilés sobre el terreno de juego. «Hay que poner... eso», sacando otra sonrisa de la 'bala'.

No fueron los únicos exjugadores del Real Avilés. Algunos más recientes de la temporada pasada, como Morcillo, no quisieron perdérselo, si bien la lista es muy amplia, al igual que una nutrida representación de los equipos de la cantera.

Los participantes en la Fan Zone tuvieron ocasión de ver tanto al presidente como a la directora general del Avilés, Diego Baeza y a Natalia González, respectivamente. Todos disimulaban los nervios, antes de ocupar un palco esta vez repleto de autoridades locales. Baeza duraría poco porque enseguida bajó al campo a ver el choque.

También fueron espectadores especiales los trabajadores de Sekurit en Saint-Gobain, que saltaron al campo con una pancarta contra el cierre, y las jugadoras del Avilés Femenino, homenajeadas en el descanso después de su merecido ascenso.