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De izquierda a derecha, Antonio Chicano, Choni y Marisa Iglesias, en la puerta del Teatro Campoamor. ARNALDO GARCÍA.

En primera fila para ver a la Princesa

Las inmediaciones del Teatro Campoamor se llenan desde primera hora de la tarde de curiosos que buscan el mejor sitio para ver el desfile de premiados e invitados con el aliciente, en esta edición, de ver a la primogénita de los Reyes que por primera vez presidirá la gala

ELCOMERCIO.ES

Viernes, 18 de octubre 2019, 16:38

El desfile de premiados e invitados que cada año acuden a la ceremonia de los Premios Princesa de Asturias en el Teatro Campoamor de Oviedo tiene su público y no es escaso. Las inmediaciones del coliseo ovetense, escenario principal de los actos ... organizados por la Fundación, se llenan edición tras edición de curiosos que buscan el mejor punto para ver a los premiados, los miembros de la Familia Real y rostros de la política, la cultura y la sociedad en general. Y no es tarea fácil. Entre periodistas, fuerzas de seguridad y de la organización, manifestantes y público en general, la misión de hacerse con un buen sitio momentos antes que inicie el goteo de personalidades se convierte en un difícil trabajo.

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Así pues, como si de un concierto se tratase y respetando el cordón de seguridad, la fachada principal del teatro ovetense comienza a congregar a los incondicionales de la ceremonia desde el mediodía. Lo sabían bien Antonio Chicano y María Iglesias, de Oviedo y Choni, de Gijón, quienes, este año se han colgado la medalla y se han hecho con una de las mejores posiciones para ver la entrada. Pasadas las dos de la tarde ya se encontraban en primera fila con sillas, ropa de abrigo por si refrescaba y una bandera de Asturias en homenaje a la Familiar Real con imágenes de los reyes don Felipe y doña Letizia y de sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.

Un niño, con la bandera de España, aguarda la llegada de los invitados. ARNALDO GARCÍA.

Ellos, al igual que el resto de personas que a esa hora empezaban a ocupar la zona, son conscientes de que este no es un año más en la historia delos Premios. La XXXIX edición incluye el aliciente de ver, además, la princesa Leonor desfilar por primera vez por la alfombra azul para presidir la gala. Será su primer discurso oficial y, tras ese momento, marcará una nueva etapa en la historia de los galardones. Junto con sus padres, la Reina Emérita y su hermana, serán los últimos en cruzar la puerta del Teatro Campoamor tras recibir el calor y el cariño de los congregados. Antonio, María y Choni serán testigos de ello y esperan que su presencia contribuya a que este momento sea inolvidable para la joven Princesa.

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