Detalles que marcan la diferencia

La Princesa de Asturias volvió a lucir zapatos de tacón de unos cuatro centímetros y color nude. Los combinó con un traje formal de dos piezas. La parte superior es de cuerpo a la caja, media manga y está totalmente cubierta de bordados brillantes. Abajo, una falda lisa en color beige, midi y con una fina tira del mismo bordado en la parte inferior. El pelo, largo, suelto y totalmente liso, mientras que el pasado año lució ondas.

La infanta Sofía, por el contrario, escogió una falda de color verde con fajín y un cuerpo de tul estampado en tono también verde, pero mucho más claro para jugar con su contraste. En los pies, bailarinas de color verde y un lazo en el empeine. Su pelo, a diferencia del de su hermana, iba recogido en una treza lateral.

La Reina emérita se mantiene fiel a su cita anual en Oviedo. Volvió a sacar del joyero dos emblemas de sus visitas a la capital, ambas firmadas por la tienda ovetense Quirós Arte Joya. Por la mañana, a su llegada, lució con broche en oro con la medalla de la Virgen de Covadonga que va rodeada de perlas y zafiros y de ella cuelgan dos perlas barrocas. Para el acto de entrega de los Premios Princesa de Asturias 2020, Doña Sofía escogió un collar de perlas kashumiga del que cuelga también la medalla de la Virgen de Covadonga. Ambas imágenes son una reproducción hecha por Quirós de una antigua imagen que perteneció a la baronesa de Grado Macarena Chávarri. En la tienda la tienen en plata, oro y plata bañada en oro, si bien las dos piezas que tiene la Reina emérita son de oro.