

Secciones
Servicios
Destacamos
Cristian Reino
Barcelona
Domingo, 31 de mayo 2020, 10:19
La guerra entre JxCat y ERC regresa con toda su crudeza, tras unos meses de falsa tregua como consecuencia de la gravedad de la pandemia. El presidente de la Generalitat ha cargado esta mañana y se ha desmarcado por completo del pacto suscrito por Esquerra con el Gobierno central para que los republicanos se abstengan en la votación de la última prórroga del estado de alarma del miércoles que viene. «La Generalitat rechaza la nueva prórroga y reclama recuperar de inmediato las competencias y la capacidad de gestionar la crisis», según ha expuesto el jefe del Ejecutivo catalán en la videoconferencia del presidente del Gobierno central con los presidentes autonómicos. El líder de JxCat ha insistido en que «naturalmente el estado de alarma termina en la fase 3», pero lo que reclama la Generalitat, «por respeto y defensa de sus competencias, es que termine mañana mismo». Torra ha asegurado que «no ha existido en absoluto la cogobernanza» y que la «centralización ha supuesto el contrario a la agilidad y la rapidez». El presidente catalán ha reclamado la gestión del ingreso mínimo vital, ha señalado que debería aplicarse lo antes posible y ha pedido «la necesidad urgentísima» de disponer de todos los recursos españoles y europeos, especialmente en una «situación económica y social gravísima», en la que, ha recordado, se ha añadido la intención de Nissan de cerrar la planta de Barcelona .
La pugna entre los dos socios del Govern se ha mantenido en una cierta baja intensidad en los últimos meses, a pesar de que ERC insiste en que el presidente de la Generalitat tiene que anunciar ya la fecha de las elecciones y Torra se niega. En el pasado mes de enero, después de que la Cámara catalana aceptara su cese como diputado autonómico con el apoyo incluido de Esquerra, el dirigente nacionalista dio por agotada la legislatura y anunció que fijaría la fecha de las elecciones en cuanto el Parlamento catalán aprobara los Presupuestos de la Generalitat. El cese de Torra fue la gota que colmó el vaso. Existe una pugna por la hegemonía del soberanismo y en el fondo subyacen dos estrategias que cada vez chocan más. ERC apuesta por el diálogo con el Gobierno y aboga por un entendimiento entre las fuerzas progresistas, a pesar de las advertencias de Junqueras, Aragonès y Rufián a Sánchez por pactar con Ciudadanos y por no reunir ya la mesa de diálogo. JxCat sigue creyendo que cuanta mayor inestabilidad haya en la política española, mejor le irá al 'procés' catalán.
Noticia Relacionada
Cuando Torra se preparaba para anunciar la fecha de las elecciones, estalló la crisis de la pandemia y ahora el presidente de la Generalitat no quiere ni oír hablar de elecciones. El dirigente nacionalista ya tuvo un duro enfrentamiento con sus socios cuando estos pactaron la celebración de la mesa de diálogo para la búsqueda de una salida a la cuestión catalana a cambio de facilitar la investidura de Pedro Sánchez. El pacto no vincula a la mitad del Govern catalán, según dijeron entonces los miembros de JxCat. Ahora afirman lo mismo. Los postconvergentes consideran que ERC ha vuelto a pactar con los socialistas a cambio de nada. Justo el día en que Carles Puigdemont afirmaba que al independentismo no le interesa que haya un Gobierno central dialogante, sino que verbalizó que lo que le conviene es un ejecutivo del PP, Ciudadanos y Vox.
El vicepresidente Pere Aragonés, que ha negociado con Pedro Sánchez el acuerdo, ha defendido esta mañana el pacto con los socialistas. «Era necesario velar por el retorno de las competencias, la Generalitat de Cataluña debe poder gestionar y decidir y debe ser capaz de gestionar los fondos europeos que le corresponden», ha afirmdo. Desde JxCat aseguraron ayer que se trata de un acuerdo que «no tiene contraprestaciones». «Nos hace temer que sea a cambio de nada, sobre todo cuando el Gobierno de Sánchez ha perdido toda su credibilidad escondiendo anteriores pactos», según Laura Borràs.
El comunicado que envió ERC reconoce que a pesar de no incluirse «explícitamente en el acuerdo», el «Gobierno español ya ha expresado públicamente su voluntad de volver a reunir la mesa de negociación una vez la pandemia entre en la fase de »nueva normalidad«. A este respecto, en ERC apuntan que »la voluntad es que en cuanto se termine el estado de alarma, se ponga fecha para una nueva reunión de la mesa de diálogo». Aragonès ha situado la próxima reunión a principios de julio.
ERC votó en contra de las dos últimas prórrogas. Torra celebró días atrás que el independentismo votara en bloque (ERC, JxCat y CUP) contra la propuesta del Gobierno de alargar el estado de alarma. Pero la unidad mostrada fue más bien un espejismo y se empieza a ver que los secesionistas no consiguen cerrar las heridas. ERC regresará el miércoles a la abstención, tras pactar con Sánchez que sea la «última prórroga» y por 15 días. «Cataluña intervendrá en la gestión de los Fondos Europeos para la reconstrucción que se han anunciado esta semana desde Bruselas. Son miles de millones para reindustrializar el país ante la crisis provocada por la pandemia», según el acuerdo trasladado por ERC. «Cataluña recuperará las competencias y será la autoridad en la toma de decisión del proceso final de la desescalada a partir de que las regiones sanitarias entren en la Fase 3», añade y el Gobierno se compromete a impulsar los cambios legales para que se evite la implantación del estado de alarma los próximos meses, incluso en el caso de rebrote.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El rincón de Euskadi que te hará sentir en los Alpes suizos
El Diario Vasco
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.