Podemos ha denunciado este miércoles ante la policía el allanamiento de los despachos de sus diputados en el Congreso. Fuentes cercanas a la dirección del partido explican a este periódico que han forzado las cerraduras de estas salas y que las pertenencias de sus parlamentarios ( ... documentos de trabajo, dispositivos informáticos, objetos personales, etc...) han sido sacadas de sus espacios personales de trabajo y depositadas en una zona de paso de la Cámara.
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Los despachos de los cuatro diputados de Podemos -eran cinco hasta la renuncia de Lilith Verstrynge a su acta hace dos semanas- habían sido asignados a principio de la legislatura, cuando aún formaban parte del Grupo Parlamentario de Sumar y aún no habían dado el salto al Grupo Mixto, que ocurrió a principios de diciembre. Por lo que aún estaban situados en la misma zona que los de la formación que lidera Yolanda Díaz, un ala de la tercera planta de la ampliación del Congreso.
En Podemos señalan que estos hechos ocurrieron el pasado lunes por la tarde y que no habían recibido «ninguna notificación» por parte del Congreso referida a la necesidad de abandonar los despachos de sus diputados, un hecho que niengan desde Sumar, que explican que ya requirieron estas dependencias para su propio personal. «Hemos estado esperando a que actuaran y esperamos que esto se resuelva y que podamos empezar a trabajar cuanto antes, porque por desgracia tenemos a compañeros y compañeras que no se pueden instalar a nivel laboral», ha explicado el diputado de Sumar, Txema Guijarro, en declaraciones a la salida de la sesión de control al Gobierno.
Aún no está claro si el desalojo lo han llevado a cabo los propios trabajadores del Congreso o si el desalojo lo ha llevado algún miembro de Sumar. El propio Guijarro, que en la anterior legislatura era diputado de Podemos, no ha negado que alguien de su bancada haya podido mover algo en dichos despachos, sin embargo, insiste en que tienen llave del espacio porque son salas que les pertenecen.
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Pese a esta disparidad de versiones, los morados consideran de la «máxima gravedad» estos hechos y esperan que la Presidencia de la Cámara «actúe» para encontrar a los responsables y garantizar los derechos de los diputados, así como que la Policía esclarezca los hechos por si fueran constitutivos de delito.
Por ello, la formación que dirige Ione Belarra ha pedido amparo a Francina Armengol, presidenta del Congreso de los Diputados, y ha puesto en conocimiento de la Policía Nacional este aceso irrregular.
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