«Un gobierno de PSOE y Podemos es una ecuación letal para los españoles»

-Vuelve a la política activa y a las Cortes. ¿Cómo se siente?

-Estoy muy contenta. Ha sido una campaña intensa y estoy muy satisfecha. Efectivamente, había estado en el Congreso, pero nunca antes había tenido la oportunidad de representar a mi tierra en el Senado. Es una experiencia nueva dentro de mi amplia y dilatada vida política. Una nueva etapa que afronto con ilusión, optimismo y con ganas de luchar por los intereses generales de mi tierra.

-Fue una votación reñida incluso dentro de su propio partido y se tuvo que esperar al último momento para saber a quién le correspondía el escaño. ¿Se esperaba esa competitividad entre candidatos de un mismo partido?

-En ningún momento, ni en la noche electoral ni en el recuento definitivo, dejé de tener la delantera en la votación. Lo que sucede es que históricamente siempre hay una distancia mucho más amplia entre candidatos y, en este caso, hubo menos. Seguramente obedece a algún tipo de condicionante.

-¿Cuál?

-El voto exterior fue muy clarificador. Las personas que están más distantes votaron según lo habitual. Sin embargo, las que lo hicieron desde aquí siguieron otro comportamiento u otra pauta.

-La coalición PP-Foro consiguió el 10-N casi 18.000 votos más que en abril. ¿A qué lo atribuye?

-La campaña nacional que lideró Pablo Casado estuvo llena de aciertos y, sin duda alguna, eso siempre repercute en los resultados de las comunidades autónomas. Pero, además, a eso hay que añadir que en esta ocasión la coalición estuvo mucho más coordinada, con actos conjuntos y mayor sintonía entre PP y Foro. Así lo hemos percibido desde dentro y entiendo que, como consecuencia, también los electores. Los votantes premiaron en aquel momento el orden en los partidos y en las coaliciones.

-Hablando de orden en los partidos, ¿qué le parece la situación actual de Foro?

-Es un partido que ha concurrido en las elecciones con nosotros y, por lo que tengo entendido, está pasando en este momento por dificultades que, espero, se resuelvan satisfactoriamente por el bien de la formación y por todo lo que puede aportar. En todo caso, igual que pido respeto para lo que ocurre en el PP, me gusta ser respetuosa sobre lo que ocurre en otros partidos.

-¿Es un buen momento para hablar de fusiones o integraciones?

-Soy muy respetuosa con los órganos y los estatutos de otros partidos. Cualquier decisión y movimiento en ese sentido les corresponde exclusivamente a ellos.

-¿Cree que en esta ocasión se constituirá Gobierno o que habrá que ir a votar por tercera vez?

-No puedo ni pensar ahora en la posibilidad de unas terceras elecciones. Pero también es una pésima noticia que Podemos pueda formar parte del Consejo de Ministros y que, encima, éste esté presidido por Pedro Sánchez. Es una ecuación letal para los españoles. Si se materializa va a causar un daño moral y económico grandísimo al país. Subrayo esto con preocupación porque allá donde Podemos puso en práctica sus políticas no causó más que daño.

-Antes de permitir unas nuevas elecciones, ¿el PP debería abstenerse?

-Hay que ir consumiendo etapas. Es sorprendente que solo unas horas después del recuento electoral Sánchez e Iglesias salieran dándose un abrazo tan efusivo. Da la sensación de que había un pacto antes de la noche electoral. Pero en política hay que ir analizando las etapas con rigor y también con serenidad. La situación del país es más que preocupante y nuestro máximo líder, Pablo Casado, sabrá ir dosificando las declaraciones y las actuaciones. Porque, que nadie lo dude, el objetivo prioritario del PP es el interés general de este país.

-Hay quien piensa que el PP está en deuda con el PSOE por aquella abstención de 2016....

-En aquel momento el PSOE no tenía líder para concurrir a otras elecciones e hizo lo que le pareció más adecuado. Pero esa situación es diametralmente diferente a la nuestra. Vamos a ir viendo cómo se van desarrollando los acontecimientos. Y vamos a ver también el papel que Sánchez le va a dar a los independentistas.

-Si finalmente se constituye Gobierno, ¿qué es lo primero que va a proponer como senadora?

-Lo que tengo en mente es una batería de preguntas e iniciativas para tratar de desempolvar esos proyectos para Asturias que los socialistas dicen que ya están, pero que nunca llegan, como el plan de vías, las iniciativas en materia industrial o en materia de comunicaciones. Quiero encontrar a Asturias en las tablas por arriba, y no por abajo, y para ello trataré de combatir y defender los intereses de Asturias en esta región.

-¿Cree que la Cámara Alta está infrautilizada?

-Uno habla de lo que conoce y del Senado conozco poquito. Creo que cualquier institución es buena para trabajar y allá donde voy me gusta dar siempre el Do de pecho. Quizá se le pueda sacar más rédito, pero fcreo que fue una Cámara muy útil en la pasada legislatura cuando Mariano Rajoy activó el artículo 155 de la Constitución.

-El PP asturiano sigue sin presidente o presidenta. ¿Cuánto tiempo más puede estar en esta situación?

-Lo desconozco por completo.

-¿Puede ocasionarle daño al partido prorrogar mucho más tiempo este vacío de poder?

-Lo cierto es que abordamos una campaña electoral sin mayores problemas. Pero me imagino que tendrán que tomar una decisión en cualquier momento por sentido común.

-¿Tiene usted algún favorito para ese puesto?

-Ninguno. Pero sí creo que el próximo presidente tiene que tener un perfil de honestidad e integridad. Y ser una persona de paz.