ERC considera que Cataluña ha entrado en una «etapa nueva» tras los procesos congresuales en las formaciones independentistas, una fase en la que los republicanos aseguran que se harán «respetar» más por parte de los socialistas y en la que no quieren ser vistos ... como una muleta del PSC y PSOE. La nueva Esquerra liderada por Oriol Junqueras se propone marcar distancias con los socialistas, después de que los republicanos, en un año, hayan investido a Pedro Sánchez y a Salvador Illa. «Siempre abiertos a escuchar y a llegar a acuerdos. Pero desde la exigencia y el cumplimiento de los acuerdos previos», ha asegurado la secretaria general y portavoz de ERC, Elisenda Alamany, tras la ejecutiva del partido.
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Los de Junqueras han sido taxativos: no negociarán nuevos pactos hasta que los socialistas cumplan con los compromisos adquiridos previamente. Es decir, no negociarán los Presupuestos, con especial incidencia en los catalanes, hasta que el PSC pueda presentar avances en el proyecto de «soberanía fiscal», la financiación singular, que para la formación secesionista es la «pieza angular» de la legislatura, así como el traspaso de Cercanías o la creación de un consorcio sobre la ejecución de inversiones de Presupuestos anteriores. «No estaremos cuatro años esperando», ha advertido Alamany, urgiendo al Govern con el concierto económico, que debería empezar a perfilar en una próxima convocatoria de las comisiones mixtas Estado Generalitat, previstas para el primer trimestre del año.
De momento, ERC ha desdeñado la oferta que le ha lanzado este lunes la consejera de Economía de la Generalitat. Alicia Romero ha emplazado desde TV3 a Esquerra para que nombre ya su equipo negociador para los Presupuestos para poder empezar a abordar las conversaciones. Alamany le ha replicado que «no hay equipo negociador porque no hay negociación». El Govern, eso sí, ha anunciado que iniciará una ronda con grupos parlamentarios y entidades sociales para trasladarles su propuesta presupuestaria y por parte de ERC acudirán los dos jefes de filas en el Parlament: Josep Maria Jové y Ester Capella, pero dejando claro que no es ningún equipo negociador.
Mientras, el Govern sigue haciendo guiños a los republicanos, a quienes considera socios prioritarios, junto a los comunes, para aprobar los Presupuestos catalanes. El Gobierno catalán ha señalado este martes, tras su reunión semanal, que esta misma semana habrá una reunión entre el Ejecutivo catalán y ERC para abordar el traspaso de Cercanías Renfe, una de las condiciones de cumplimiento fijada por Esquerra. La consejera de Territorio, Sílvia Paneque, trasladará a los republicanos su propuesta de cómo tiene que ser la empresa mixta (Estado-Generalitat), que gestionará el traspaso competencial a la administración autonómica, que empezará con la línea R1. El anuncio lo ha hecho Paneque el día que ha dimitido el presidente de Renfe. El Govern, a su vez, ha convocado para esta tarde del martes una reunión con el Consejo de diálogo social de Cataluña, de la que debería salir una declaración conjunta, de la Generalitat, de sindicatos y de patronales, a favor de la condonación del 20% de la deuda contraída por Cataluña del FLA (fondo de liquidez autonómica). Illa reclamará asimismo al Gobierno que publique los datos de ejecución presupuestaria en Cataluña.
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El Govern, además, se ha sumado a la iniciativa del Gobierno de conmemorar el medio siglo de la muerte de Franco. La administración catalana ha aprobado la creación de un grupo de trabajo para elaborar un programa sobre la efeméride. El objetivo es reflexionar sobre la evolución democrática, promover la memoria histórica como herramienta contra cualquier forma de autoritarismo y enaltecer los valores democráticos compartidos, según el Govern. Serán actos en todo el territorio, como exposiciones, actividades pedagógicas y charlas sobre el franquismo y el camino hacia la democracia.
En el debate sobre los indultos para los líderes del 'procés', Alamany se ha declarado partidaria de nuevas concesiones. Días atrás, Jordi Turull, de Junts, rechazó nuevas medidas de gracia que no sean la propia aplicación de la amnistía. El Gobierno tiene ya sobre la mesa la petición de un particular para indultar por segunda vez a Oriol Junqueras, Jordi Turull, Dolors Bassa y Raül Romeva. En este caso, afectaría a la pena que aún cumplen de 12 años de inhabilitación. «No renunciaremos a ninguna medida» de «política antirrepresiva», según la secretaria general. ERC ayudará en la concesión de nuevos indultos, si de la formación republicana «depende».
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