San Chin Choon reaparece y pone fecha para declarar por el 'caso mascarillas'

San Chin Choon ha trasladado al juez instructor de Madrid Adolfo Carretero su imposibilidad de desplazarse a España para comparecer por motivos laborales y ha ofrecido declarar en octubre a través de una videoconferencia desde la embajada de España en Kuala Lumpur, capital de Malasia.

En un escrito, el proveedor contesta al emplazamiento del magistrado para que aportara fechas en las que podría comparecer, «de forma presencial», en el procedimiento que investiga una presunta estafa al Ayuntamiento de Madrid en la compra de mascarillas, guantes y test.

San Chin Choon es la persona que suministró el material sanitario a los investigados para su venta al consistorio, que abonó casi 11 millones de euros, de los que seis acabaron en manos de los comisionistas. Los imputados ya declararon ante el juez que eran agentes exclusivos de la empresa malaya y que tenían una relacional comercial fluida para rebatir la acusación de fraude.

El pasado julio, el juez Carretero se opuso a la petición de Luceño de reactivar la comisión rogatoria a Malasia para interrogar al proveedor malasio debido a que este país flagela a sus presos, lo que supone «un obstáculo insalvable para cualquier cooperación judicial».

En el escrito, San Chin Choon informa ahora que cuando le llamaron las autoridades de su país contestó a las preguntas de la comisión rogatoria enviada desde España. «No entiendo por qué el Gobierno de Malasia no envió mis respuestas a España», ha dicho, en línea con lo que declaró ante el juez a finales de abril el propio Luceño, quien avanzó que su supuesto socio sí había colaborado.

El empresario asiático comunica ahora que no puede viajar a España por temas laborables, pero se ofrece a comparecer el día 21 o 28 de octubre a las diez de la mañana a través de videconferencia desde la embajada de España en Kuala Lumpur. Explica que entiende que la embajada puede tener medios técnicos para poder realizar una videoconferencia y conectarse a un juzgado español, que «seguro que también tiene un sistema de videoconferencia». Ahora el juez deberá tomar una decisión tras recibir el escrito.