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La política tiene sus rituales y los 'tiempos' de los partidos, sobre todo cuando se trata de elegir candidatos, son uno de ellos. A los 'tiempos' de Foro se remitió en este caso la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, para no dar ... una respuesta concluyente sobre la expectativa creada de que presida la organización a partir del congreso del próximo mes de septiembre y sea, en consecuencia, la cabeza de cartel a las elecciones autonómicas de 2019, aunque pocos dudan de que ese será el resultado final del proceso. «Hay que respetar los tiempos», se excusó en varias ocasiones al ser preguntada al respecto, si bien admitió que el escenario que se abre es «ilusionante» una vez que se finiquita su compromiso de estar dos legislaturas al frente del consistorio gijonés. Los apoyos para que dé el paso al frente crecen y ayer se sumaron dirigentes de Gijón, Somiedo, Ribera de Arriba, Aller o Gozón.
Los movimientos que se suceden para que Moriyón sea la candidata al Principado el año próximo provocaron un episodio curioso ayer en Oviedo. A media mañana estaba convocado un acto en el que la actual presidenta del partido, Cristina Coto, presentaba su libro 'En voz alta', una recopilación de artículos e intervenciones parlamentarias. La cita se producía un día después de que trascendiera que varios dirigentes locales respaldaban que la alcaldesa de Gijón tome las riendas de la organización en el congreso previsto para septiembre, planteamiento del que Coto no tenía conocimiento previo. En la puesta de largo del libro, en un hotel de la capital, estaban los principales dirigentes foristas -Coto y Moriyón, el secretario general, Francisco Álvarez-Cascos, diputados regionales...-, en un ambiente expectante ante el acelerado devenir de los acontecimientos.
Preguntada a su llegada, Moriyón no quiso zanjar el debate en ningún sentido con el citado argumento de la necesidad de «respetar los tiempos», que en este caso sitúan en julio el pistoletazo de salida de las primarias y en septiembre el congreso. «No es tiempo de decisiones», añadió, por respeto a quienes forman parte de la organización. La alcaldesa sí mostró su «agradecimiento» a quienes han sacado su nombre a la palestra, aunque lo interpretó no como un respaldo exclusivo a su persona sino al trabajo desarrollado en el consistorio gijonés.
Confirmó Moriyón que su etapa municipal ha concluido, en virtud del compromiso de limitar la permanencia en el cargo a dos mandatos, y se refirió a sus expectativas de futuro, bien el retorno a una trayectoria profesional «a la que es difícil renunciar», bien ese emplazamiento al liderazgo autonómico del partido. Retos «ilusionantes» en todos los casos, indicó, remarcando que en modo alguno se ve presionada para tomar una decisión. «Presión -razonó- es el plan económico del ayuntamiento o que el plan de vías vaya bien».
A la espera del manejo de los 'tiempos', el discurrir de los hechos pone a Moriyón muy cerca de ese liderazgo del partido y, en consecuencia, de la candidatura al Principado en 2019. A los apoyos iniciales llegados de Siero, Noreña o Ribadesella hay que unir los procedentes de organizaciones, cargos o dirigentes de Somiedo, Aller, Gozón o Ribera de Arriba. Y también de su propia casa, de Gijón, El secretario general de la organización local y portavoz del equipo de gobierno municipal, Fernando Couto, fue muy claro al respecto. La alcaldesa, reflexionó, «es una persona que puede liderar proyectos que permitan aplicar políticas de cambio» en Asturias. Otros nombres conocidos del partido como Inaciu Iglesias o José Suárez Arias-Cachero saludaron igualmente esta posibilidad electoral.
La resaca del salto al primer plano de una posible candidatura de Carmen Moriyón dejó en segundo plano la presentación del libro de Coto, que arropada por el diputado Pedro Leal y por el catedrático José María Girón, no quiso hacer declaraciones sobre la cuestión interna. En una posición complicada, la presidenta y portavoz parlamentaria se centró en la política general, en defender el papel que Foro juega tanto en la Junta General como en el Congreso y en destacar que la alternativa para Asturias «no pasa por más izquierda sino por el espacio de libertad y respeto a las personas que ofrece el centro reformista».
¿Qué sucederá en adelante? La decisión está en manos de las bases, dijo por su parte el secretario general, Francisco Álvarez-Cascos, que presumió de los más de 10.000 afiliados que tiene Foro, de los que tiene «muy buena opinión», y cuyo criterio identificó como decisivo. Los militantes tienen «libertad de decisión y de voto» y pueden pronunciarse «en público, en privado o en voz baja». Los órganos directivos «no deben suplantar a los militantes», argumentó, comparando la situación de Foro con la del PSOE, al que se refirió sin citarlo para deslizar que allí el candidato -Adrián Barbón- «ha sido designado por el secretario general nacional», en alusión a Pedro Sánchez.
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