Aragonès llama al Rey a reflexionar sobre el plantón que le dará el soberanismo

El rey Felipe VI viaja mañana a Barcelona, su primera visita a Cataluña desde la inhabilitación del presidente de la Generalitat. El Govern confirmó el martes pasado que ningún representante del Ejecutivo autonómico acudirá al acto que preside el monarca, junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el centro de Barcelona, organizado por el Consorcio de la Zona Franca, una entidad estatal. Se trata de una entrega de premios en un salón empresarial, que tendrá lugar en la estación de Francia, junto al puerto barcelonés. El soberanismo ha decidido darle plantón al jefe del Estado: no acudirá nadie del Govern, ni del Parlament, ni la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

El vacío oficial de las tres principales instituciones de Cataluña debería provocar algún tipo de «reflexión» en el jefe del Estado, según opinó Aragonès. El dirigente de ERC cree que el día que se consumó el divorcio entre una parte de Cataluña y el monarca fue el 3-O de 2017. Tras una jornada de huelga, auspiciada por el Govern, dos días después del referéndum ilegal, el Rey llamó a asegurar el orden constitucional. Según Aragonès, con ese discurso, quebró su neutralidad institucional y se alineó con el 'a por ellos' y con la «derecha judicial». «Los catalanes no tenemos Rey», afirmó. Aragonès emplazó a la militancia a reafirmar en las urnas el próximo 14 de febrero la mayoría que a su entender hay en Cataluña a favor del republicanismo.

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Se da una curiosa circunstancia respecto al acto que preside mañana Felipe VI. El organizador del evento es el Consorcio de la zona Franca de Barcelona, cuyo presidente es Pere Navarro. Como primer secretario del PSC, fue el primer dirigente de relevancia que pidió públicamente la abdicación del entonces rey Juan Carlos I. Lo dijo en 2013 (un año antes de la renuncia del año emérito) para que Felipe VI lidere una segunda transición y arbitre los cambios que requiere el país. Uno de ellos, la cuestión catalana. El independentismo, de hecho, tratará de trasladar mañana la imagen de que la resolución de este conflicto es más urgente que nunca. No habrá apenas presencia institucional en el acto presidido por el jefe del Estado, para escenificar el rechazo a España y a la Jefatura del Estado, y el secesionismo se prepara además para una nueva jornada de protestas. Al margen de las acciones que los CDR puedan protagonizar, lo que vuelve a poner en alerta a la Policía, que blindará el centro de Barcelona, la ANC y Ómnium, junto con los partidos independentistas y algunos sindicatos, han organizado una cadena humana en ele entorno de la estación de Francia. Desde allí hasta la estatua de Colón. Aunque está por ver si pueden llevar a cabo la 'performance', teniendo en cuenta el precedente del Consejo de Ministros celebrado en la Llotja de Mar, muy cerca de la la estación de Francia, en diciembre de 2018, en que la Policía cercó toda la zona.