Aragonès: «Los indultos facilitarían la aprobación de los Presupuestos»

Aragonès tomó ayer el mando como vicepresidente con funciones de presidente. Es presidente en funciones. Ha revelado que no ha hablado con Pedro Sánchez en las últimas horas, que no le ha llamado y que hace tiempo que no hablan. El dirigente republicano ha asegurado además que no tiene previsto llamar al presidente del Gobierno para reunir la mesa de diálogo entre el Gobierno central y la Generalitat. A su entender, la mesa ha cambiado respecto a tal y como estaba concebida y han cambiado las condiciones porque quien lideraba la delegación catalana ha sido cesada. «No llamaré al presidente Sánchez porque estamos en un gobierno en funciones», ha dicho. No piensa, de momento, liderar la interlocución con el Ejecutivo central. Pero si la Moncloa toma la iniciativa y plantea un contenido de la mesa para avanzar, podría replantearse su posición.

En clave catalana, Aragonès ha situado el calendario electoral en la primera quincena de febrero, a poder ser domingo se ha conjurado, por lo que las dos fechas que se desprenden son el 7 y el 14 de febrero. El líder republicano ha señalado que su voluntad durante estos cuatro meses de interinidad es que el ejecutivo no se detenga. «No tenemos presidente, pero no podemos estar sin gobierno y hemos de continuar funcionando para poder hacer frente a la pandemia y a la crisis económica», ha asegurado.

Sigue sin aclarar si será el candidato a las elecciones, aunque se da por hecho, y se ha mostrado partidario de repetir la coalición JxCat y ERC en el próximo gobierno. «Queremos un gobierno independentista que defense el derecho de autodeterminación y la amnistía», ha señalado. Eso sí, discrepa con sus socios. Ha sugerido que él no hubiera desobedecido a la Junta Electoral y habría retirado la pancarta y no compra la propuesta que lanzan Torra y Puigdemont de convertir las autonómicas en un plebiscito sobre la independencia.