Víctor de Aldama se ofreció expresamente el pasado jueves, al término de su declaración ante el juez Ismael Moreno, instructor del 'caso Koldo', no solo a aportar a este magistrado pruebas de su larguísima lista de acusaciones, sino también a volver a declarar ... ante este togado tantas veces como lo solicite. Y no solo. También a comparecer ante el magistrado Santiago Pedraz, el juez del 'caso hidrocarburos' que le dejó en libertad a pesar de acusarle de tener todavía 74 millones de euros ocultos. Y, sobre todo, insistió en que se ofrecía igualmente a confesar todo lo que sabe cuando se lo reclame el Supremo.
Publicidad
El alto tribunal, que el pasado 7 de noviembre abrió una investigación por integración en organización criminal, tráfico de influencias, cohecho y malversación contra José Luis Ábalos –que sigue siendo aforado al no haber renunciado a su acta–, debe decidir qué hace con las graves acusaciones vertidas por el empresario contra otros diputados y ministros.
Noticias relacionadas
Melchor Sáiz-Pardo
Ander Azpiroz
El fiscal anticorrupción Luis Pastor –que se juega buena parte de su prestigio profesional con el «pacto global» cerrado con Aldama para excarcelarle a cambio de una confesión mucho más extensa que la del jueves y que incluya pruebas– quiso que ese día el imputado, 'in voce', confirmara ante el magistrado su «voluntad e intención» de «declarar y comparecer» tanto ante Moreno y Pedraz como ante el instructor designado en el Supremo, Leopoldo Puente. Aldama aceptó en ese acto los términos de ese acuerdo de llegar con sus denuncias hasta el más alto tribunal.
Según acabó la declaración, el propio Pastor pidió expresamente al juez que una «deducción de copia testimoniada» de la declaración fuera remitida de inmediato a Pedraz y al Supremo. Fuentes del alto tribunal, que confirmaron que el juez Leopoldo Puente ya tiene copia de la confesión de Aldama, revelaron que la defensa del cerebro de la trama ya ha hecho saber que su patrocinado está disponible en cualquier momento para ir a la sede de la Plaza de Villa de París a declarar sobre cualquiera de los aforados. En ese caso, el conseguidor tendría la condición de testigo (sin derecho a mentir) ya que el Tribunal Supremo, por el momento, no quiere arrastrar para sí toda la causa sobre esta gran trama corrupta.
Publicidad
Pero ante de escuchar a Aldama, Leopoldo Puente quiere tomar declaración a Ábalos. El instructor del Supremo tiene previsto en breve ofrecer al exministro declarar voluntariamente. Si el todavía diputado, a quien Aldama acusa de haberse quedado con cerca de un millón en mordidas, se negara, el Supremo pediría el suplicatorio al Congreso.
Y a partir de ahí –explican fuentes de la causa– el instructor del Supremo decidirá si llama a Víctor de Aldama y si entra a investigar las «acusaciones delictivas directas» que el encausado lanzó particularmente contra dos aforados: Santos Cerdán y Ángel Víctor Torres, a los que imputó directamente cobrar o pedir mordidas.
Publicidad
Sobre el primero dijo que Koldo García entregó al secretario de Organización del PSOE 15.000 euros en un bar enfrente de Ferraz como parte del 'cupo vasco', dando a entender que cada federación socialista se financiaba con mordidas de adjudicaciones en su territorio. Sobre el expresidente canario y hoy ministro de Política Territorial, aseguró que le pidió 50.000 euros por la gestión de un pelotazo de las mascarillas en el archipiélago.
Ambos han negado tajantemente esas acusaciones y son firmantes de la demanda de conciliación previa a la querella conjunta por injurias y calumnias contra el conseguidor, que también han suscrito Pedro Sánchez, Begoña Gómez, Salvador Illa, María Jesús Montero y su su jefe de Gabinete, Carlos Moreno, al que Aldama también acusó de haberse embolsado 25.000 euros por aplazar el pago de los impuestos a la Agencia Tributaria.
Publicidad
Hay otros dos aforados que fueron nombrados por Aldama en su declaración, aunque no les acusó directamente de la comisión de delitos: Fernando Grande-Marlaska y Teresa Ribera. Del ministro del Interior señaló que ordenó crear una «zona Schengen» para evitar que Delcy Rodríguez pisara suelo español formalmente y que dio instrucciones para garantizar la seguridad del chalet en Madrid donde debía hospedarse en secreto la mandataria bolivariana. De la vicepresidenta tercera dijo que estuvo presente junto a él en encuentros en los que participó también Begoña Gómez y el CEO de Air Europa, Javier Hidalgo, coincidiendo con rescate de la aerolínea por parte del Gobierno.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.