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I. VILLAR
GIJÓN.
Jueves, 16 de enero 2020, 03:58
«Le deseamos un próspero trabajo y una buena experiencia en el Ministerio de Igualdad y en su nuevo puesto. Estoy convencida de que la echaremos de menos». Con estos buenos deseos de parte de la alcaldesa, Ana González, y con el aplauso de sus compañeros de Corporación llegó ayer Alba González a su último Pleno en el Ayuntamiento de Gijón, aún dispuesta a asumir en los próximos días el cargo de directora general en el ministerio que dirige Irene Montero, con quien ya trabajó como asesora parlamentaria para Unidas Podemos. «La responsabilidad es alta, pero tenemos una ministra que vale todo y que está convencida de que este es un ministerio feminista. Sabemos de dónde venimos y a dónde queremos llegar, y el empeño va a ser absoluto», explicó en un receso de la sesión plenaria, tras pedir disculpas a los periodistas por no poder ahondar aún en los detalles sobre las que iban a ser sus competencias.
Aseguró que haber sido concejala durante un semestre «ha sido un honor», y lamentó que su paso por el Ayuntamiento haya sido «más breve de lo esperado. Supongo que en el fondo este nuevo Gobierno ilusionante que nos ha llenado de alegría era algo que no se esperaba». Y añadió que se va «con la sensación de no haber podido desarrollar el trabajo de oposición que habría querido en todas las áreas», mencionando cuestiones concernientes a las áreas que llevaba dentro del grupo municipal como «todo lo que tiene que ver con los servicios sociales, con la necesaria remnicipalización del servicio de ayuda a domicilio y con la política pública de vivienda». Que ayer fuera su último Pleno no la eximió de defender varias iniciativas de la coalición Podemos-Equo, como un ruego para que en Gijón se pinten bancos con los colores de la bandera arcoíris «como forma de visibilizar el compromiso de la ciudad con la defensa de los derechos humanos de las y los vecinos del colectivo» y una pregunta sobre el grado de cumplimiento por parte de la empresa Aralia de sus obligaciones como prestataria del servicio municipal de ayuda a domicilio.
«Es una pena dejar a mis compañeras, porque creo que hemos constituido un grupo municipal ejemplar», añadió, recordando que por primera vez en la Corporación municipal un grupo ha estado formado íntegramente por mujeres. «Me hacía mucha ilusión compartir este último Pleno con ellas». Con independencia del puesto que ocupe ahora en el Ministerio de Igualdad, que no será de tan alto rango como el que se preveía, hoy presentará su baja formal como concejala del Ayuntamiento. La sustituirá Juan Chaves, que el pasado mandato fue coordinador del grupo municipal Xixón Sí Puede, candidatura que agrupaba a Podemos y Equo.
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